Gran tarde taurina en Navas de San Juan

Con casi lleno en los tendidos, Navas de San Juan abrió su feria taurina con un festival benéfico para recaudar fondos destinados al tejado de la ermita de la Estrella. El público respondió con entusiasmo a una tarde en la que se vivieron momentos de gran emoción y torería. Abrió plaza el rejoneador Sebastián Fernández, que saludó al novillo de La Castilleja con garrocha y templó en banderillas con gran exposición, informa Marisa Fernández. Acertó con el rejón de muerte y cortó dos orejas. El segundo llevaba el hierro de Domingo Hernández y le correspondió en suerte a Enrique Ponce, que mostró mantener su temple característico que fue la nota dominante tanto con el capote como con la muleta, logrando una faena que llegó a los tendidos y cortó las dos orejas.

Vicente Barrera se sobrepuso a una voltereta del de Las Ramblas en el recibo de capa para después dejar constancia de su toreo vertical y templado. Paseó también dos orejas. Javier Conde firmó una faena de gran estética y belleza al novillo de Virgen María. Su personal concepto del toreo se impuso en cada muletazo. Dos orejas. El quinto, de Garcigrande, fue un gran novillo, bravo, humillador y repetidor. David Galván brilló de principio a fin, con una faena profunda, ligada y de gran expresión. El público pidió el indulto, pero al tratarse de un festival no fue posible. Cortó dos orejas y rabo y el novillo fue premiado con la vuelta al ruedo. Olga Casado, novillera con picadores, mostró entrega y buen oficio. Aprovechó las cualidades de su novillo y firmó una faena templada y conectada, cortando dos orejas y rabo. Cerró el festejo Manuel Quintana, sin picadores, que mostró sus grandes cualidades y proyección. Solo la espada le apartó del triunfo. Todos los actuantes salieron a hombros en una tarde redonda, en la que la afición respondió a la llamada de la solidaridad y disfrutó del toreo en plenitud.