El amor de Peal de Becerro que se entrega a su divina Señora

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La noche se resistía a llegar cuando los pealeños recibieron entre vítores y plegarias a la Virgen de la Encarnación, patrona y alcaldesa honoraria del municipio. La mañana sirvió como toma de contacto con la divina imagen, pues se celebró una fiesta religiosa en su honor donde los más devotos pudieron dar gracias y renovar sus promesas ante la Santa Madre. Llegadas las 21:00 horas, sonó la “Marcha Real” cuando los portones del templo se abrieron, descubriendo a sus anderos portando sobre los hombros a la protectora de Peal de Becerro. La Agrupación Musical “Caballero León” y la Banda de Música Municipal pusieron los sones en el día grande de aquel rincón del Alto Guadalquivir. Se inició la marcha desde la plaza del propio templo, buscando como destino la ubicación del Ayuntamiento. A cada paso que marcaron los portadores de la Señora de la Encarnación, se sucedían las palabras en voz baja, como si de susurros al oído de su protectora se tratasen. Las lágrimas de emoción embargaron las escenas, que mostraban en todo momento un pueblo entregado.

La penumbra fue cubriendo el manto celeste, provocando que el alumbrado público iluminara con matices el rostro de la patrona de los pealeños, dando, en ciertos puntos, sensación de luz propia a la Encarnación Coronada. El largo recorrido no fue óbice para la devoción. Las fiestas, que comenzaron el fin de semana, llegaron a su culmen con la salida procesional de la “Reina de los Cielos”, la misma que desde tiempos inmemoriales cuida de sus fieles hijos. Los mismos, que cuando el final se atisbaba, de vuelta de nuevo a su templo, corrieron a profesar una última plegaria, un último deseo, un último rezo, antes de volver a ver descansar, hasta el próximo año a su Sagrada Madre.

“A la Virgen le pido que nos proteja y podamos seguir tirando todos hacia delante. Son días muy bonitos aquí en Peal y vamos a disfrutar mucho”, afirmó Andrés del Real. Mercedes del Barrio sostuvo que “las fiestas se viven con un abanico por culpa del calor, pero bien”. “Es el primer año que vengo para la fiesta, pero me gusta lo que veo. Hoy espero poder pasármelo bien y le pediré a la Virgen que nos ayude”, indicó Carmen Solas. José Vilches enunció que “la patrona es lo más grande”, que tienen y valoró especialmente “la gente que viene y el ambiente que hay”. “Hoy se celebra la fiesta de la patrona. Mientras yo siga estando bien voy a seguir viniendo, porque tenemos mucha devoción por la Encarnación”, explicó Ana Aránega.