Hoy, once de mes

    12 dic 2025 / 09:37 H.
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    Hoy, once de mes, escribo en honor de la Virgen de la Capilla, Patrona de Jaén y Alcaldesa Mayor de esta ciudad. Y escribo con especial devoción pues todos los once de cada mes recordamos la gracia que tuvo Jaén con el glorioso Descenso de la Virgen María, allá por el año 1430, para socorro y amparo de nuestros mayores.

    El mes de diciembre es el mes de la Inmaculada Concepción y es el mes del Misterio de la Natividad del Señor. Son cuatro los Dogmas Marianos, es decir, los Dogmas relativos a la Virgen María; la Virginidad perpetua de María, La Maternidad divina de María, La Inmaculada Concepción de María y la Asunción de María a los cielos.

    La Inmaculada Concepción de la Virgen María quizás sea el Dogma Mariano mas conocido y popular. ¿Y cual es el significado del dogma de la Inmaculada Concepción?. El dogma dice que María es preservada del mal por los méritos de Jesucristo, es la imagen de esa predilección que tiene Dios por María, que es la elegida para que Dios se encarne, se haga hombre y camine entre nosotros, y está siempre unida a Él, está siempre en el camino de Jesús. La Virgen María pertenece al núcleo central de nuestra confesión de fe, como lo expresamos en el credo: “nació de Santa María Virgen”. María fue llamada por el Padre para ser la madre de su Hijo por medio del Espíritu. Ella, desde el momento de su concepción, debía ser signo del amor, al ser origen y contenido de la salvación. María es quien nos enseña el camino y por eso decía Juan Pablo II que María nos lleva siempre al Señor; “a Dios por María”. El dogma de la Inmaculada Concepción tiene una especialidad digna de resaltar, y es que se trata de una manifestación del “sensus fidei”, latinismo que significa “el sentido de los fieles”, es decir, la apreciación de la fe por parte de todo el pueblo fiel de Jesucristo. Es un dogma nacido del pueblo, y es que durante mucho tiempo, el pueblo sencillo, incluso analfabeto, estuvo bien formado teológicamente. Desde muy antiguo las madres inculcaban la fe a sus hijos y se les enseñaba a rezar y se les instruía en los rudimentos de la fe. Los sacerdotes predicaban la sana doctrina desde los púlpitos, y los templos, con sus pinturas, esculturas y retablos, eran una auténtica Biblia en piedra y un auténtico catecismo en imágenes. De este modo, sucedió que cuando había teólogos que ponían en duda la Inmaculada Concepción, las gentes sencillas replicaban con argumentos contundentes e insistían en que no era posible que la Madre de Dios, la elegida por Dios, nuestra Madre del Cielo, estuviese sometida aún por un momento al mal. El “sensus fidei”, el sentido de la fe, arraigó y consiguió que se proclamase el dogma de la Inmaculada Concepción.

    Pues bien, hay una propuesta de dogma que recientemente ha podido tener cierta repercusión, que es el dogma de “María Corredentora”. La Iglesia primitiva confirmó el papel de María como Abogada en el plan de salvación de Dios. Fueron muchos los primeros Santos y Padres de la Iglesia que se refirieron a la intercesión de María. Y así ha sido durante toda la milenaria historia de la iglesia. Juan Pablo II redactó la Carta Encíclica “Redemptoris Mater” sobre la bienaventurada Virgen María en la vida de la iglesia peregrina. María como Madre del Redentor, pero no redentora ella misma junto él. El papa León XIV acaba de aclarar, el pasado 5 de noviembre, el papel de María en la doctrina y en la tradición católica, lo cual ha recibido con críticas de algunos que han considerado que la principal santa del misticismo católico ha sido en cierto modo relegada. El documento lleva por rúbrica “Mater Populi Fidelis” y es una forma de frenar ciertos abusos de una devoción que ha crecido considerablemente en los últimos siglos, y que ha podido incluso a usurpar el protagonismo que, para la Iglesia, debe corresponder a Dios; Dios Padre, Jesús Hijo y el Espíritu Santo fuerza divina. Preparado por el Dicasterio para la Doctrina de la Fe, y firmado por León XIV, el documento presenta un recorrido histórico sobre la comprensión de María a lo largo del cristianismo, rechaza el uso del título de “corredentora” para su papel y aboga por la prudencia al referirse a ella como mediadora. El documento, denominado “Mater Populi Fidelis (Nota doctrinal sobre algunos títulos marianos referidos a la cooperación de María en la obra de la salvación)” puede encontrarse en la página oficial del vaticano www.vatican.va (con el buscador de Google es bien fácil encontrarlo) y recomiendo encarecidamente su lectura. Sería una muy interesante línea formativa la sugerencia de la lectura de este documento a las Cofradías de la Diócesis.

    Esta Navidad podemos acudir al Camarín de la Patrona de Jaén, la Virgen de la Capilla, en San Ildefonso, para rezar y meditar sobre estas cuestiones, y leer un texto que cuelga enmarcado en la magnífica reja de la Capilla; “Bendito seas si la imagen de la Virgen de la Capilla te lleva a Dios, pero recuerda que Jesús está en la Eucaristía”; este texto se colocó con otros fines, pero ya anticipaba lo que León XIV ha venido a refrendar el pasado mes de noviembre.

    Feliz Navidad a todo el mundo.

    MIGUEL SÁNCHEZ-GASCA

    Periodistas demócratas, reaccionad

    Los periodistas de EE UU y de aquí, lógicamente indignados, nos han informado de los insultos de Trump a la periodista del “The New York Times” que le preguntó sobre su relación con el pederasta Epstein, su viejo amigo: “¡Silencio, silencio, cerdita!”; también de su violenta reacción a la que le preguntó sobre su salud, llamándola “reportera de pacotilla, fea por dentro y por fuera”. Pero no nos hemos enterado aún de que, en defensa de su profesión y de la democracia, si no ellas mismas, sus medios de difusión o/y Asociaciones de Prensa hayan emprendido acciones legales en defensa propia y de la democracia. Si no ahora, ¿cuándo?

    DIEGO MAS MAS / MADRID

    Hogueras de Santa Lucía en Hinojares

    No hay duda de que la provincia de Jaén se encuentra atestada de maravillas y de atractivos que la convierten en un territorio único gracias a su patrimonio histórico, cultural, natural y, por supuesto, gastronómico. Es el caso de Hinojares y la pedanía de Cuenca, con 343 habitantes, en la comarca del Alto Guadalquivir. Además, parte de su término municipal se encuentra en el Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas. Pues bien, en esta villa jiennense está todo preparado para que se disfrute de una noche mágica el próximo sábado con motivo de la festividad de Santa Lucía, una mártir cristiana considerada la patrona de la vista, los ciegos y quienes sufren problemas oculares. Aquí, en este pequeño municipio, se van a celebrar las tradicionales hogueras en honor a Santa Lucía, donde no faltarán los productos típicos, la música, el baile y, sobre todo, la convivencia entre los propios vecinos y visitantes. El espacio escogido será la explanada del polideportivo. Hay que destacar que, gracias al Ayuntamiento hinojareño y a los lugareños, esta costumbre se mantiene muy viva. Asimismo, esta cita cuenta con la colaboración de la Junta. Ojalá que se siga transmitiendo el costumbrismo entre las generaciones futuras. ¡Jaén, mucho por descubrir!

    JUAN LIÉBANA / JAÉN

    Cartas de los Lectores