Ingresa en prisión el sospechoso del homicidio de Pozo Alcón
C. C. L. estuvo custodiado en la Unidad de Salud Mental por la Guardia Civil
El hombre que llamó a su hermano para pedirle, por favor, que se acercara a su casa, para que este se encontrara allí con una mujer muerta en la leñera, C. C. L., ingresa en prisión. Es la medida ordenada por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Cazorla. Esta sala es la encargada de un caso truculento, que causó una tremenda conmoción en Pozo Alcón, donde, el pasado sábado 26 de marzo, se confirmó la muerte de Josefa P., una conocida vecina del municipio.
El hombre que, tras la investigación de la Guardia Civil, es el principal sospechoso de este crimen, había ingresado el día 15 en la Unidad de Salud Mental del Hospital San Juan de la Cruz de Úbeda. No era la primera vez que pisaba el centro este conocido vecino de Pozo Alcón, de 44 años. Una vez que los agentes de la Benemérita se hicieron cargo de las pesquisas, determinaron que era el supuesto autor, acudieron al complejo hospitalario ubetense, para conducir a C. C. L. ante su señoría, en calidad de investigado por un homicidio. Esta decidió su posterior traslado a otra unidad de Psiquiatría, esta vez, la del Complejo Hospitalario de Jaén.
El hombre, después de sentarse ante la instructora, estaba en “detención judicial”, por lo tanto, durante su estancia en el recinto hospitalario, fue custodiado por agentes del Instituto Armado. La presencia de los guardias civiles reforzaba las habituales medidas de vigilancia que ya se imponen en las plantas sexta y séptima del centro de la capital jiennense, donde ya se controlan las entradas y salidas de los pacientes y un profesional está al tanto de los movimientos de cada uno de ellos, incluso, estos pueden llegar a estar permanentemente acompañados. ¿Qué esperaba la jueza para tomar una decisión sobre el presunto homicida poceño? El dictamen de un facultativo sobre su estado. Una vez que contó con este informe, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Cazorla optó por su internamiento penitenciario, por la prisión preventiva.
No ha transcendido aún, según las fuentes consultadas por este periódico, si su traslado a la cárcel es un paso previo a su entrada en un psiquiátrico penitenciario. Una de estas instituciones está precisamente ubicada en la provincia de Sevilla. La Policía Judicial de la Comandancia fue la encargada de analizar, de forma minuciosa, las tres plantas del inmueble donde se localizó a la víctima, fallecida, según averiguaron los agentes, el 14 de marzo. Durante las casi dos semanas en las que la mujer estuvo inerte dentro de la casa, nadie había denunciado su desaparición. No existía relación sentimental alguna entre la difunta y el sospechoso del homicidio.