Comer y fornicar

Al margen del recorrido que tenga como caso de corrupción por mordidas, comisiones y amaños de concesiones y contratos el caso del ya bautizado tito Berni añade notas propias de la historia grotesca y casposa en la que se mezclan delito y picaresca y que concluye en mesas de buen yantar y sobremesas en lupanares con señoritas de compañía donde diputados, obreros de la ley, que por la mañana votan contra la prostitucion en el templo de la soberanía por la noche se encaman con obreras del amor para que así todo quede dentro de la ortodoxia del obrerismo como concepto a poner en valor. Siguen los pasos de Roldán, de Guerrero el de los Ere, de los peperos mallorquines de Santos y Matas, de los beneficiados de la Gurtel de los que tanto sabe Villarejo y en fin, de una retahila de personajes dignos del cervantino patio de Monipodio en el que a un recién llegado preguntaron: ¿ es vuestra merced por ventura ladrón?” Sí, respondió, para servir a Dios y a las buenas gentes, aunque no de los muy cursados; todavía estoy en el año de noviciado”. Los de ahora tienen aprobada la licenciatura cum laude. Y lo pagarán en las urnas. El pueblo no perdona ni a trincones ni a puteros.