Mujeres, siempre a la sombra
A lo largo de la historia de la provincia, son muchas las féminas que han destacado en su labor tanto profesional como personal, aunque la mayoría son grandes desconocidas para la sociedad

Pioneras y necesarias. Han estado siempre ahí, aunque en la sombra. Durante muchas décadas fueron relegadas a un segundo plano, a pesar del talento, de los logros, de los avances sociales que consiguieron con su trabajo, son mujeres en desconocidas y, algunas, son jiennenses. Es el caso de mujeres del Santo Reino como Beatriz de la Cueva de Alvarado, nacida en Úbeda en 1490. Fue una noble y la única mujer que ostentó un cargo tan alto en la América española y fue una de las últimas que ocupó brevemente, por dos días, el mando interino de la gobernación guatemalteca a mediados del mes de septiembre de 1541, por fallecimiento en el cargo, antes de quedar el territorio subordinado al Virreinato de Nueva España desde el 17 de mayo de 1542.
Pocos saben también quien fue Teresa Torres y su importante para la ciudad de Jaén. Conocida por ser la fiel esposa de Miguel Lucas de Iranzo, quien gobernó la ciudad durante 15 años, Teresa de Torres comenzó a gobernarla cuando se convirtió en su viuda y rigió la ciudad durante más de 25 años. Otras, como Amelia López, destaca por ser la primera mujer dedicada profesionalmente a la fotografía en España, si bien en la misma época fotografiaba en Barcelona otra mujer. López Cabrera nació en Almería, pero llegó a Jaén muy joven, casándose con el editor y tipógrafo Francisco López Vizcaíno, dueño de una afamada imprenta jiennense. En los primeros meses de 1860 abre estudio en la calle Obispo Arquellada 2, casa en la que estaba situado el negocio de su marido y que asimismo era el domicilio familiar. Esta profesional, que rotulará las cartulinas de sus fotografías con el nombre Amalia L. de López, aprendió las claves del oficio del Conde de Lipa —vivió en Jaén una temporada retratando y enseñando fotografía—, y su sentido publicitario hizo que insertara un anuncio en el periódico local “El Anunciador” de la provincia de Jaén. Algunas de ellas, muy pocas, como Isabel Méndez, de la que apenas se conocen datos; Magdalena del Prado, nacida en Torredonjimeno, o Josefa Sevillano, poetisa apacible y colaboradora en la prensa jiennense del siglo X IX, tienen o tuvieron una calle propia en Jaén. Sin embargo, aún queda mucho para hacerles justicia.