Sonrisas que traspasan fronteras, la mirada especial de la fotógrafa Gloria Nistal en el Pedro Poveda

Exposición de imágenes de 30 países para demostrar que otro mundo es posible a través de la alegría y la sonrisa

12 nov 2025 / 18:26 H.
Ver comentarios

A las diez de la mañana, cuando el sol se colaba tamizado entre las cristaleras del edificio, los alumnos del colegio Pedro Poveda de Jaén aguardaban en la planta baja, donde la fotógrafa madrileña Gloria Nistal presentaba su exposición “Sonrisas como bálsamo para un mundo en crisis”. La sala, blanca y diáfana, se había transformado en un pequeño mirador del mundo: Fotografías enmarcadas con sobriedad, apoyadas en una delgada estantería que recorría las paredes como una línea continua de luz y gesto humano. Se trata de un proyecto que llevan a cabo la Asociación de Desarrollo Rural de Sierra Mágina y el proyecto Rajab, dedicado a la “acogida y encuentro con personas inmigrantes” y que ayer tuvo parada en la capital jiennense. Presentó a la escritora, poeta, profesora, fotógrafa y viajera, la dinamizadora cultural de la ADR de Sierra Mágina, Cristina Vico, quien ensalzó la trayectoria de Gloria Nistal, con un currículum en viajes por el llamado Tercer Mundo fuera de lo común, y subrayó, de forma especial cómo “es capaz de transportarnos a cualquier lugar del mundo con una fotografía; lo que estáis viendo aquí- subrayó- son imágenes que ilustran claramente cómo la mirada de Gloria es capaz de captar ese preciso instante que llena de vida una fotografía”. Según Cristina Vico, “otro mundo es posible si nos centramos en lo importante de la vida, la sonrisa, la alegría de los seres humanos, vivan donde vivan”. Presentes también en el acto, la directora del Colegio Pedro Poveda de Jaén, Marta Cruz, junto con la coordinadora del Proyecto Rajab, Pilar Poveda, así como la directora pedagógica de Infantil y Primaria, Pilar Almagro. Tras las palabras de bienvenida, la fotógrafa agradeció la invitación y compartió brevemente la emoción que le producía exponer en un entorno educativo antes de dar paso a la contemplación de las imágenes en una charla interactiva con los alumnos.

Más tarde, en conversación con este periódico, Gloria Nistal explicó el sentido de la muestra, compuesta por fotografías realizadas en más de treinta países y cuatro continentes. “Son imágenes de niños, mujeres, adultos y personas mayores”, contó, “y todas tienen como punto común la sonrisa acogedora. Por eso la exposición se llama ‘Sonrisas como bálsamo para un mundo en crisis’. Es un mundo complicado, con guerras, hambre y migraciones, y lo que pretendo con esta exposición es que esas personas, desde sus lugares de origen, sonrían y lo hagan de manera espontánea”.

Nistal insistió en que no busca retratos posados, sino instantes de vida auténticos: “Nunca pido que me sonrían. Me los encuentro en los mercados, en las playas, en las iglesias, haciendo lo que hacen cada día. Esa sonrisa natural es la que quiero que resuma la exposición. No importa si están subidos a un árbol o trabajando, lo que me interesa es la energía que hay detrás de ese gesto”. En su voz se adivinaba el respeto por quienes se dejan mirar sin artificios. “Las sonrisas de esta exposición pertenecen a personas de distintas edades, religiones, países y culturas, pero todas comparten algo en común: la capacidad de acoger al otro. Yo, como fotógrafa, siempre llego de fuera, pero esas sonrisas me recibían como si fuera de casa. Por eso digo que la sonrisa es el motor principal de la humanidad”. Durante la conversación, evocó una de las fotografías a la que guarda especial cariño: “Son niños en la puerta de la cárcel donde estuvo preso Mandela, en Robben Island, en Sudáfrica. Me gusta porque, después de un pasado de esclavitud y apartheid, esos niños ríen, juegan, bromean. Han aprendido a vivir sin rencor. Esa imagen me recuerda que la sonrisa, incluso después del dolor, es una forma de libertad”.

La artista explicó también el camino que la trajo a Jaén, una provincia que confesó haber descubierto hace pocos años gracias a la escritora Socorro Mármol, presente también en el acto inaugural de la exposición. “Ella me invitó en 2017 a colaborar en un libro llamado ‘Sierra Mágina, territorio literario’, y desde entonces me siento vinculada a esta tierra. A partir de ese proyecto, he venido muchas veces y cada visita ha sido un aprendizaje. Jaén para mí era una gran desconocida, pero ya forma parte de mi mapa afectivo”.

Cultura
set (1 = 1)