Gloria Nistal expone imágenes de 30 países en el Pedro Poveda

La fotógrafa presenta la muestra “Sonrisas como bálsamo para un mundo en crisis”

11 nov 2025 / 19:26 H.
Ver comentarios

A las diez de la mañana, cuando el sol se colaba tamizado entre las cristaleras del edificio, los alumnos del Colegio Pedro Poveda de Jaén aguardaban en la planta baja, donde la fotógrafa Gloria Nistal presentaba su exposición “Sonrisas como bálsamo para un mundo en crisis”. La sala, blanca y diáfana, se había transformado en un pequeño mirador del mundo: fotografías enmarcadas con sobriedad, apoyadas en una delgada estantería que recorría las paredes como una línea continua de luz y gesto humano.

La directora del centro, Marta Cruz, junto con la coordinadora del Proyecto Rajab, de la asociación Educación y Cultura, Pilar Poveda, fueron las encargadas de introducir a la autora ante el público. Tras sus palabras de bienvenida, la fotógrafa agradeció la invitación y compartió brevemente la emoción que le producía exponer en un entorno educativo antes de dar paso a la contemplación de las imágenes con una breve charla interactiva con los alumnos.

Más tarde, en conversación con este periódico, Gloria Nistal explicó el sentido de la muestra, compuesta por fotografías realizadas en más de treinta países y cuatro continentes. “Son imágenes de niños, mujeres, adultos y personas mayores”, contó, “y todas tienen como punto común la sonrisa acogedora. Por eso la exposición se llama ‘Sonrisas como bálsamo para un mundo en crisis’. Es un mundo complicado, con guerras, hambre y migraciones, y lo que pretendo con esta exposición es que esas personas, desde sus lugares de origen, sonrían y lo hagan de manera espontánea”.

Nistal insistió en que no busca retratos posados, sino instantes de vida auténticos: “Nunca pido que me sonrían. Me los encuentro en los mercados, en las playas, en las iglesias, haciendo lo que hacen cada día. Esa sonrisa natural es la que quiero que resuma la exposición. No importa si están subidos a un árbol o trabajando, lo que me interesa es la energía que hay detrás de ese gesto”. En su voz se adivinaba el respeto por quienes se dejan mirar sin artificios. “Las sonrisas de esta exposición pertenecen a personas de distintas edades, religiones, países y culturas, pero todas comparten algo en común: la capacidad de acoger al otro. Yo, como fotógrafa, siempre llego de fuera, pero esas sonrisas me recibían como si fuera de casa. Por eso digo que la sonrisa es el motor principal de la humanidad”.

La artista explicó también el camino que la trajo a Jaén, una provincia que confesó haber descubierto hace pocos años gracias a la escritora Socorro Mármol. “Ella me invitó en 2017 a colaborar en un libro llamado Sierra Mágina, territorio literario, y desde entonces me siento vinculada a esta tierra. A partir de ese proyecto, he venido muchas veces y cada visita ha sido un aprendizaje. Jaén para mí era una gran desconocida, pero ya forma parte de mi mapa afectivo”. Durante la conversación, evocó una de las fotografías a la que guarda especial cariño: “Son niños en la puerta de la cárcel donde estuvo preso Mandela, en la isla de Robben Island, Sudáfrica. Me gusta porque, después de un pasado de esclavitud y apartheid, esos niños ríen, juegan, bromean. Han aprendido a vivir sin rencor. Esa imagen me recuerda que la sonrisa, incluso después del dolor, es una forma de libertad”.

Con “Sonrisas como bálsamo para un mundo en crisis”, Gloria Nistal propone mirar el mundo con otros ojos, los del asombro y la empatía. Su exposición, minimalista en forma pero inmensa en significado, convirtió por unas horas al colegio jiennense en una geografía de afectos, una cartografía hecha de miradas limpias y sonrisas que cruzan fronteras sin necesidad de pasaporte. Cada fotografía parecía contener un pequeño relato, un testimonio de dignidad que invitaba al espectador a reconocerse en el otro, a entender que la alegría también puede ser resistencia. Más que una exposición, Nistal dio una lección de humanidad: la de aprender que una sonrisa, cuando es sincera, puede ser el idioma universal de la esperanza.

Cultura
set (1 = 1)