Papas a lo pobre “al pelotón”

10 jul 2016 / 11:45 H.

Las patatas a lo pobre, como su propio nombre indica, es un plato muy humilde de origen campesino, típico de la gastronomía andaluza, concretamente de la zona oriental. Su elaboración es fácil, económica y admite multitud de variaciones. Siempre podemos adaptar nuestra receta a los ingredientes que tengamos a mano. Con algo de carne o huevos y verdura forma un plato único, también son una buena guarnición y la base perfecta para una tortilla de patatas. En casa de la abuela, se hacía de más para elaborar una deliciosa sopa de ajo de patata (receta que vimos en publicaciones anteriores). Consejo: me encanta una versión de patatas al ajillo que consiste en freír las patatas con cebolla y, una vez apartadas, se machaca un diente de ajo con orégano y sal, se riega con un poco de vinagre blanco y se incorpora a las patatas mientras se remueven. Siempre me transporta a una infancia maravillosa de comidas familiares. ¡Y están deliciosas!

Elaboración

INGREDIENTES.

5 patatas grandes, 1 cebolla o cebolleta, 1 pimiento verde, 3 chorizos, 3 huevos, aceite de oliva virgen extra (AOVE) y sal.

PREPARACIÓN.

Partimos de que la receta básica consta de patatas, cebolla, aceite y sal. Todo lo que añadamos de más es opcional y al gusto de vuestros comensales. En mi caso, para animar a los peques a comer verduras, le añado un calabacín. El sabor es suave y agradable.

Lavar y pelar las patatas. Dejar escurrir para eliminar el agua. Cortar en rodajas con un grosor mediano.

En una sartén, calentar un poco de aceite. Cuando esté caliente, incorporar las patatas poco a poco, a la vez que movemos la sartén para evitar que se peguen. Echar un poco de sal. Después de dar unas vueltas y remojarlas bien, añadir la cebolla y el pimiento cortados en juliana. Este plato es muy sencillo, ahora solo queda remover de vez en cuando, con cuidado de no romper demasiado las patatas.

El punto exacto dependerá de vuestros gustos. A mis peques les gustan un poco tostadas, siempre juegan a quién se lleva más en su plato. En otra sartén freír los chorizos en rodajas, y un huevo por comensal como acompañamiento. O puedes echar los huevos en el centro de las patatas y remover hasta que cuajen.

Probad formas diferentes de elaboración con los niños y os sorprenderán con su creatividad.