Un sueño “a fuego lento”

José Manuel Zafra es un ubetense que desde muy joven tuvo claro que lo suyo era la cocina. Es por ello que un día llegó a Barcelona para triunfar como chef, lo que no se esperaba es que su talento lo fuera a llevar hasta Argentina

20 oct 2019 / 12:15 H.

La ciudad de Los Cerros siempre ha sido una cuna de talento y el chef José Manuel Zafra es un claro ejemplo de ello. Decidido a triunfar en lo que siempre amó, la cocina, dejó muy joven su querida tierra y se trasladó a la ciudad Condal para dejar el nombre de su tierra y sus raíces en lo más alto. Allí pasó un tiempo ejerciendo hasta que hace poco más de un año su vida cambió. La oportunidad para convertirse en asesor de un restaurante de comida española en Buenos Aires le planteó un nuevo reto que no quiso dejar pasar. “En un principio, la idea era venir para tres meses, pero mi pareja decidió acompañarme por lo que hemos decidido quedarnos un tiempo”, relata el ubetense, a lo que añade: “Si ella no hubiese optado por seguirme en esta aventura lo más probable es que ya hubiera regresado”. Sin embargo, el amor por su profesión y el apoyo de su chica le dieron la fuerza para echarse el petate al hombro e ir a cumplir un nuevo sueño que nunca imaginó.

En Buenos Aires es chef ejecutivo del Hotel Pulitzer, chef de Boca de toro y Sky bar. “Mi intención es dejar el restaurante bien armado y si puede ser posicionado entre los mejores”, declara este joven que convierte en delicia todo aquello que toca. Puesto que su meta es ambiciosa, su día a día consiste en trabajar para poder recoger los frutos antes de marcharse. Eso sí, las horas que tiene libres las aprovecha al máximo con sus amigos y pareja para visitar los rincones de la ciudad, conocer la gastronomía y la propia esencia de los argentinos. Un pueblo que lo ha tratado como a uno más desde el principio. “El proceso de adaptación fue bastante fácil, mi superior nos ayudó mucho y nos aconsejó para que estuviéramos lo más cómodos posible”. A pesar de ello, tuvo que acostumbrarse al cambio horario, cinco horas con respecto a España, la mayor inseguridad que existe en la ciudad, así como diversas costumbres que al final Zafra terminó por hacer propias para ser uno más.

Una de las grandes ventajas es que, según el chef, “el pueblo argentino sabe bastante de España”, pues son muchos los que un día hicieron de la Argentina una nueva patria. “Ellos se sorprenden con nuestra gastronomía, con las tapas, especialmente los que han podido viajar a España. La mayoría me han hablado de Andalucía, les encanta por el trato de su gente, sus fiestas, el flamenco y también les gusta mucho sus playas y paisajes”, comenta. Cuando recuerda con sus amigos y compañeros de allí esas singularidades que hace únicas la tierra de la que procede, no puede evitar sentir cierta nostalgia por sus raíces. “Echo de menos sobre todo a mi familia, a veces es necesario el abrazo de unos padres, hermana y abuelos. También me pasa con las costumbres y las fiestas”, confiesa, sin olvidar la comida, tan esencial en su vida. Tanto se acuerda de ella que cuando su familia fue a visitarlo tenían como prioridad “llevarle jamón ibérico, ochios y aceite de oliva”.

En este tiempo en el que José Manuel Zafra ha intentado dejar buena muestra de su versión en el restaurante que trabaja ha protagonizado múltiples anécdotas. “Una de las que más recuerdo me ocurrió al principio de mi estancia en el país, mis futuros empleados dejaban de trabajar si jugaba River o Boca Juniors que son dos equipos de fútbol que levantan mucha pasión”, recuerda, aunque también destaca los domingos, una jornada en la que es fácil toparse con algún grupos de personas bailando tango en una plaza o la tradición del asado. Son costumbres y singularidades que a Zafra lo han enriquecido y le han hecho comprobar que viajar es una formidable manera para “aprender en lo personal y profesional”.

Con billete de vuelta

El mejor sueño de todos. Allí donde esté un reto entre fogones se puede encontrar a el joven ubetense José Manuel Zafra. Es por ello que a pesar de su juventud, cuenta con tan solo 27 años, ha pasado por la ciudad de Barcelona para terminar en Buenos Aires, pero solo por el momento.

Su intención, desde que se fuera de su querida y anhelada Úbeda, es regresar. “Con el tiempo me encantaría volver a Jaén, es mi sueño desde siempre, no se cuándo será pero veo cercana la fecha”, asegura con ilusión, aunque antes tenga que pasar por otras ciudades o incluso volver a Barcelona, donde aún mantiene empleo. Lo más importante es que este valiente puede convertirse en el próximo orgullo de sus paisanos y quien sabe si algún día Úbeda contará con su estrella Michelín gracias al talento de Zafra. De momento, lo mejor será tener su nombre presente y no dejar se seguirle la pista.

Vivencias que llenan

Salir de casa, dejar a los tuyos, aprender a desenvolverse en un lugar que no es el habitual y madurar a pasos de gigante no debe de ser fácil para los jóvenes jiennenses que un día tuvieron que dejar su tierra natal. Sin embargo, residir en otras ciudades aporta muchos elementos beneficiosos. “Lo mejor es todo lo que se aprende día a día, los valores que ellos le dan a cosas que nosotros en España no valoramos y al contrario”, dice Zafra.

Tan positiva está siendo la experiencia del ubetense que asegura que “no tendría nada negativo que destacar”, aunque sí reflexiona sobre la situación por la que esta pasando los argentinos. “El país está mal económicamente y los sueldos no les acompaña, lo que dificulta mucho el día a día de la gente, se ven personas que lo pasan realmente mal”, comenta el chef sobre sus vivencias en el país.

sIN UN DESTINO FIJO, PERO SIEMPRE CON LAS COSAS CLARAS: TRABAJAR Y DISFRUTAR
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A la pregunta ¿qué hay después de Buenos Aires? Zafra no se arriesga a contestar de forma rotunda. Nunca se planteó llegar a Argentina y ha sido una de las mejores decisiones que ha tomado, por ello no descarta ningún destino. “Me están saliendo bastantes asesoramiento fuera de España, pero no se lo que puede pasar. Nunca habría yo pensado vivir en Argentina hasta que me lo propusieron y no tarde en decidir mi repuesta, a la siguiente imagino que me lo pensaría más, pero nunca sabemos que pasara en el futuro”, sentencia el ubetense para el que no existen barreras. Solo tiene claro algo, su

deseo de pasar este año la Navidad con los suyos en Úbeda. “Ya que son seis años los que paso fuera de casa en estas fiestas, necesito bajar y comerme las uvas con los míos, por lo que voy a intentar que este sea así”, describe Zafra para el que no habrá sido fácil dejar la “cuna” siendo un niño para volver a las raíces como un gran profesional. A cambio, se lleva el orgullo de los suyos y de una tierra que sabe que cuenta con un grande de los fogones entre los suyos.

Compañeros, amigos y una gran familia
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Si hay algo que Zafra echa de menos es a su familia, esencial para él. Sin embargo, los valores de superación y trabajo que le han inculcado sus padres, Josefa y Manolo, lo han llevado a no rendirse y perseguir sus sueños. Mientras tanto, los suyos esperan con ganas el momento de volver a tenerlo cerca.

Un equipo unido donde les lleve la vida
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Dicen que los amigos son la familia que se elige y este ubetense es un afortunado. Artur y Fernando, los amigos que aparecen junto a él frente al estadio de Boca Juniors fueron a visitarlo para demostrar que la amistad no es cuestión de kilómetros, por lo que a pesar de la distancia siempre serán un buen equipo.

la mejor compañera de vida y aventuras
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Olga, la pareja de Zafra es, en gran parte, responsable de que el joven esté viviendo un sueño. Ella lo animó para emprender una aventura que los ha llevado hasta Buenos Aires, donde se apoyan y cuidan en su día a día. En cualquier lugar hay algo que tienen claro, si es juntos, el resultado será genial.

Responsables de la alegría del estómago
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Trabajar en la cocina de un restaurante incluye compartir muchas horas con compañeros. En la imagen que acompaña este texto, José Manuel Zafra aparece con parte de su equipo en la puerta del restaurante Boca de Toro, en Buenos Aires, donde cada día se emplean a fondo para superarse.