María Caballero, una maestra del encaje de bolillo y con contrato a sus 80 años
La jiennense trabaja para Macrosad enseñando encaje de bolillo, bordado y manualidades

La recompensa a toda una vida sin dejar de trabajar. Esta es la sensación que puede tener, desde hace poco tiempo, María Caballero Martínez. Ibreña de origen pero que, desde que se casó, reside en Linares. Allí y, concretamente en el Centro “Paqui Rojas”, lleva desde hace 15 años para Macrosad enseñando encaje de bolillo, bordado y todo tipo de manualidades. Aunque, como confiesa, “desde que tengo uso de razón”, siempre ha trabajado: “He trabajado antes en mi casa, pero cuando ya me casé y tuve a mis hijos, ya comencé a trabajar para asociaciones de amas de casa o escuelas de adultos. Llevaré como unos cuarenta años trabajando”. Actualmente y, desde hace unos 15 años, trabaja para Macrosad y su formación la avala en oficios antiguos como el encaje de bolillo: “Tengo más de 200 diplomas puesto que he hecho cursos por toda España. Conozco del encaje de bolillo todas las técnica habidas y por haber”. Hasta hace pocas semanas, a María Caballero le daban de alta durante nueves meses, el tiempo que duraba el curso, y, una vez que llegaba el verano, le daban de baja. Hasta que un día, recibió una carta: “Ponía que tenía un contrato indefinido”. Entonces ella, tras consultar previamente tanto con su marido como con su hijo, ya comenzaron a asimilar que María Caballero ya tenía un empleo fijo. Como detalla ella, su hijo le preguntó: “¿Pero saben que tienes 80 años?”. A lo que María Caballero respondió: “Claro que lo saben (entre risas)”.
Aunque su situación contractual haya cambiado, para María Caballero todo sigue igual... o casi: “Lo bueno que tengo ahora es que mis vacaciones me las pagan, por lo demás sigo viniendo a trabajar igual que todos los días”.
Aunque María Caballero enseña mucha más cosas a parte del encaje de bolillo. Por ejemplo, sus alumnos han aprendido y mucho a trabajar el bordado y con otro tipo de materiales: “Hago cuero repujado, plata repujada, macramé, vidrieras... Y lámparas de Tiffany también hemos hecho a montones”. Ahora tiene un puesto fijo, pero aún le restan algunos años más para poder obtener una cotización adecuada para jubilarse: “En la Seguridad Social me dijeron que hasta 2027, en febrero aproximadamente, me pasara por la oficina”. Mientras ese momento llega, sus alumnos continuarán aprendiendo de todo el talento que demuestra en sus clases María Caballero.