Las Hermanitas de los Pobres piden ayuda a los jiennenses

Confinadas en la residencia, apelan a la generosidad para poder subsistir

25 mar 2020 / 12:07 H.
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Bajo mínimos y a la espera de ser “rescatadas”. Así se encuentran las Hermanitas de los Pobres, que en su día se originaron para la atención y el cuidado de las personas mayores y los enfermos, y cuya forma de vida está basada en la confianza absoluta en la providencia. Por ello, muchos recordarán a las hermanas de puerta en puerta de la ciudad para solicitar ayuda con el objetivo de seguir con su tarea a favor de las personas a las que atienden. Pues bien, debido al confinamiento obligado por el estado de alarma que ha provocado el covid-19, las hermanas no pueden salir a la calle a pedir para sus mayores y se encuentran en una situación muy delicada, pues muchas de ellas también cuentan con edad avanzada y deben llevar a cabo todas las precauciones posibles. Tanto, que Diario JAÉN ha intentado entrevistarlas en la residencia, situada en el Paseo de la Estación, para que relataran su situación y han preferido declinar la oferta por “temor” a exponerse a un posible contagio.

Para solucionar su situación han decidido apelar a la solidaridad y generosidad de los jiennenses y lanzan un llamamiento en el piden ayuda a la ciudadanía. De esta forma, apuntan que ellas viven gracias a lo que recaudan de la caridad ya que no reciben subvenciones, y ahora, de una manera especial, quieren contar con la ayuda de todos los que puedan colaborar. El número de cuenta bancaria que han facilitado y donde hacer el ingreso para ayudarlas es el siguiente, de Bankia: IBAN: ES30-2038-9800-2260-0051-5579.

A cambio, las hermanas manifiestan que, desde su residencia, ofrecerán su oración por todos los jiennenses, para que pronto acabe esta situación, con las menores consecuencias posibles y la ciudad y sus gentes vuelvan a la normalidad. En la actualidad, en la residencia de las Hermanitas de los Pobres de Jaén, viven trece hermanas que se encargan de coordinar el trabajo. Ellas, junto con sus más de treinta empleados atienden a ochenta ancianos que en la actualidad se encuentran aislados para evitar así que el virus traspase las puertas. En base a la labor que realizan con la tercera generación, tan esencial, esperan recibir el apoyo de sus paisanos en unos días tan complicados para todos.

Jaén