Denuncias por el incivismo en el Pago de Juan Ramos

Olores insoportables, imágenes lamentables y una frustración creciente. Esa es la realidad que viven cada verano —y cada vez más inviernos— los vecinos de Pago de Juan Ramos, especialmente con el aumento de residentes en esta zona. El foco del problema está claro: la acumulación de basuras fuera de los contenedores y la falta de civismo por parte de algunos ciudadanos. La situación se ha vuelto tan habitual como indignante. José Sánchez, presidente de la asociación de vecinos de pago de Juan Ramos, lo denuncia con claridad: “No es sólo que haya basura fuera de los contenedores, es que hay muebles, electrodomésticos, escombros, paragolpes, hamacas... encuentras cualquier cosa menos basura doméstica”.

Aunque desde el servicio de limpieza y de recogida de basura realizan sus labores de lunes a viernes, el problema se dispara durante los fines de semana. “El camión baja todos los días entre semana y se lleva todo lo que está fuera y dentro de los contenedores, pero el fin de semana no baja, y es cuando más basura se acumula”, explica Sánchez. Esto deja a la vista muchos desperdicios que se amontonan hasta el lunes, y generan un foco de insalubridad, malos olores y posibles plagas, especialmente en verano. Los vecinos han comenzado a expresar su hartazgo con mensajes directos pegados en los contenedores. Carteles como “¿Tanto cuesta meter la basura dentro de los contenedores?”, “Ya que estamos, vaciamos los contenedores y dejamos la basura en mitad de la carretera” o incluso “Vamos a apuntarnos al concurso de cuál es el barrio más asqueroso de Jaén, ganamos de sobra” muestran el nivel de indignación. “Los han puesto algunos vecinos que no pueden más. Es una llamada a la conciencia”, afirma Sánchez.

El problema, asegura el presidente de la asociación vecinal, no es nuevo ni exclusivo de esta zona residencial. “Esto pasa en todos los barrios: Puente Tablas, Puente Jontoya, Puente de la Sierra... Hay una falta de civismo generalizada. Algunos ni se molestan en abrir el contenedor, tiran las bolsas al suelo aunque estén vacíos”. A pesar de esta situación, que se repite año tras año, Sánchez reconoce que desde el Ayuntamiento hacen esfuerzos para mantener el servicio diario de recogida de residuos, y que en ocasiones han respondido con rapidez a las diferentes denuncias vecinales. Además, insiste en que la raíz del problema es la conducta incívica de los ciudadanos, no solo de los residentes. “Incluso hay talleres que van a tirar paragolpes o piezas de coche. Lo hemos denunciado, pero esto no cambia. Dicen que para eso pagan impuestos”, añade Sánchez. Desde la asociación insisten en que el Punto Limpio existe y puede usarse para este tipo de residuos voluminosos, pero muchos vecinos optan por la vía fácil: dejarlo todo en el suelo, junto al contenedor.