Caídos, pero no olvidados

Trazos de un mapa que refleja la deshonra de un país. Cifras, mapas, monumentos, símbolos, da igual la manera, todos muestran el horror del periodo más oscuro de una España que no olvida, porque todavía tiene fosas comunes que guardan el polvo de los que no ganaron, de los que un día defendieron unas ideas y pagaron por ello, porque aún se mantiene viva la esperanza de familias que anhelan encontrar el padre o el abuelo que nunca volvió a casa. Lugares repartidos por la provincia en los que aún se respira el miedo a una guerra que enfrentó a rojos y azules y que se saldó con miles de muertos que descansan eternamente lejos de los suyos.

Todas estas zonas están recogidas en el Mapa de Fosas de Andalucía que, desde su creación, por parte de la Junta, ha experimentado dos grandes actualizaciones, una en el año 2006 y otra en 2016, dejando un total de 28 en la provincia. En el caso de la capital, son seis las que se tienen localizadas, en las que se estima que haya unas 1.265 víctimas. El resto se reparten entre Alcalá la Real, con tres; Andújar, que tiene dos; así como Alcaudete, Arjona, Arjonilla, Baeza, Bailén, Baños de la Encina, Cazorla, la Carolina, Linares, Mancha Real, Marmolejo, Navas de San Juan, Sorihuela del Guadalimar, Torredonjimeno, Martos Úbeda y Villacarrillo, todos ellos con una y que sumarían un total de 2.042 víctimas según las estimaciones. De todas ellas, hay cuatro localizadas, siete exhumadas y catorce dignificadas Así, la última fosa en sumarse a la lista se localiza en la zona suroeste de la provincia.

No obstante, desde la Junta de Andalucía aseguran que el mapa de fosas “es una herramienta viva y abierta, susceptible de sufrir modificaciones en función de aquellos trabajos que se vayan realizando cada año en las fosas existentes en el territorio andaluz”. En la actualidad se trabaja desde el servicio del Comisionado para la Concordia en la actualización de los datos que aparecen en dicho mapa en relación con los trabajos de exhumación desarrollados en el último año, labor que aún no ha finalizado. En comparación con otras provincias, las cifras destacan Sevilla, Huelva y Cádiz, les siguen Granada, Málaga, Córdoba, y tras ella, Jaén, solo por delante de Almería.