Desayuno calórico

08 dic 2019 / 11:43 H.

T e has cansado, a veces, del típico desayuno de tostadas y café? Siempre he defendido que es fantástico escuchar a tu cuerpo y darle lo que realmente le apetece. No regirnos siempre por la rutina, costumbres y lo que los establecimientos, donde comemos fuera de casa, nos ofrecen. Sí, hoy me levanté con tiempo y dediqué unos minutos a poner la atención en mí y, como algunas otras veces me ha sucedido, a mi cuerpo le apetecía algo diferente. Y qué mejor manera de atenderme de forma amorosa que darle lo que desea. Sí, tal vez pienses que vas rápido cada mañana. Pero, la receta de esta semana tan sólo va a llevarte 5 minutos más de tu tiempo. ¿Crees que vale la pena dedicártelo para arrancar con un día de plena satisfacción? Como a ese niño al que le damos lo que le apetece. En todos los ámbitos de tu vida, dedica un espacio para mimarte, atenderte y quererte un poquito más. Desde ahí, se genera una energía a tu alrededor que todos percibirán. ¿Empezar el día con una sencilla receta puede marca la diferencia? Da igual lo que prepares, sólo escucha qué te pide tu cuerpo a cada momento. Y lánzate...

Elaboración

INGREDIENTES.

Media cebolla blanca o cebolleta, medio pimiento rojo, medio pimiento verde, 1 huevo o queso rayado, aceite de oliva virgen extra (AOVE), pimienta molida y sal.

PREPARACIÓN.

Pela la cebolla, lava los pimientos y córtalos todos en tiras finas: logrando así que se cocinen más rápido. Deja escurrir.

Cuando esté bien caliente, incorpora primero la cebolla. Mientras se pocha a fuego medio-alto, añade los pimientos, sal y pimienta al gusto.

Remueve continuamente. No necesitas que las verduras queden blandas. Personalmente, me gusta que queden “al dente” o crujientes, ya que la explosión de sabores y su textura estimulan mis sentidos. Dos o tres minutos son suficientes. El siguiente paso, tiene dos opciones, las cuales yo suelo alternar en días diferentes. La primera, añade un huevo y remueve suavemente hasta que quede cuajado del todo. La segunda, en vez del huevo, rocía las verduras con queso rayado. Deja medio minuto y dale la vuelta como a una tortilla, para que se dore por los dos lados. Sirve bien caliente, acompañado de una buena taza de té.

CONSEJO.

Prueba con diferentes ingredientes como el bacon, taquitos de jamón, champiñones, tomate,... Y déjate sorprender.