Ritmos que transportan a Oriente

Crece la XIII edición del Festival Internacional de Danza Bellysurdance

04 feb 2018 / 11:29 H.

U na cita muy original. Sensualidad y movimientos sugerentes podrían definir una disciplina que ha tomado mucha fuerza en los últimos años. Muestra de ello son los catorce años que hace que Noemí Real, más conocida como Alika, cogió impulso y se convirtió en una de las promotoras de este arte en la provincia, por lo que decidió embarcarse en la organización de un certamen que se conoce como el Festival Internacional de Danza y Creación Oriental Actual “Bellysurdance, que se encuentra en plena edición 2018.

El festival comenzó el pasado viernes con una serie de talleres impartidos por profesores profesionales que se trasladaron desde varios lugares del mundo, como Portugal o Argentina, y de diversos puntos del país como Cataluña para ofrecer su talento y formación a los sesenta y cinco alumnos de danza que han participado en esta edición, con gran presencia jiennense, y otros profesionales interesados en continuar con su formación. Cada edición, estos talleres se agrupan en una temática que en esta ocasión se ha titulado Ritmos. Además, la primera de las jornadas se completó con una novedosa actividad: un simposio que versó sobre la investigación en la danza y otras artes y que reunió a distintos profesores, músicos y artistas de artes plásticas para discutir sobre la materia. “Nuestro objetivo con este certamen es hacer que la danza se vea como un arte más y complementarla con características contemporáneas”, asegura Noemí Real, la directora del festival.

Tras un primer día de trabajo, llegó el día grande. La segunda jornada siguió con la profundización de los talleres sobre ritmo por parte de los distintos profesores participantes y, por la tarde, se produjo el momento más esperado. El teatro Darymelia abrió sus puertas para acoger a más de doscientas treinta personas para contemplar las distintas coreografías que prepararon todos los profesores y algunos de los alumnos. Ritmo, melodías que hacían viajar hasta los rincones más bellos de Oriente Medio o África y el talento de los bailarines que hicieron que muchos se movieran de sus asientos. Tampoco faltó música que completó un espectáculo que cada año ofrece nuevos matices y sorpresas. Un concierto que se suma al éxito de estos catorce año “y nos da fuerzas para seguir trabajando para próximas ediciones”. El certamen finalizará este mediodía en el albergue, lugar que ha sido testigo de las diferentes actividades, con la clausura de los talleres y la asimilación de los conceptos trabajados durante las tres jornadas, aunque el show continuará.