Juanto Casero Del Arco: Una nueva vuelta al corazón del rock

LA ENTREVISTA

Juanto es el batería de una banda de rock nacida en el corazón de Jaén, Asesinos del Amor. Con una propuesta que mezcla crudeza, sensibilidad y actitud, el grupo irrumpe de nuevo en la escena musical con Me quiero ir. Se trata de una canción cargada de energía que marca el inicio de una nueva etapa para la banda, integrada también por Eli (voz), José (guitarra y coros) y Laila (bajo y coros). Asesinos del Amor ha construido su identidad sobre una base de punk rock con letras directas y una puesta en escena que prioriza lo auténtico. Ahora el grupo se lanza a una gira que recorrerá varias ciudades de España.

—¿Cómo nace Asesinos del Amor y cuál fue la motivación inicial para formar el grupo?

—El grupo nace en la pandemia. Yo estaba en otra banda en Jaén, pero decidí salir y montar algo donde el rock and roll fuese lo importante. Quería canalizar el dolor que había vivido en esos momentos difíciles a través de la música. Así nació Asesinos del Amor, con ese nombre que combina dos conceptos aparentemente contradictorios: lo peor y lo mejor del ser humano. Nuestra intención siempre ha sido pensar en cómo la gente puede conectar con nuestras letras en las situaciones emocionales por las que pasan.

—¿Cómo ha ido evolucionando la banda durante estos años?

—Desde el comienzo hemos mantenido la esencia: punk rock interpretado por una mujer. Esa idea ha estado clara desde el principio. En una primera etapa, lanzamos dos EP con temas muy intensos y directos, todos en la línea del punk rock más visceral. A mediados del año pasado, varios miembros decidieron dejar el grupo. No es fácil mantener una banda a flote cuando hablamos de música emergente. Hay que invertir y los beneficios no siempre llegan. Pero decidimos continuar, con nuevos integrantes y la misma filosofía: mostrar que todos tenemos dos caminos dentro, el del asesino y el del amor. Y cada uno debe elegir cuál seguir.

—Ahora trabajan en la promoción de Me quiero ir. ¿Cómo está siendo la respuesta?

—Muy buena, la verdad. Lo estrenamos en directo por primera vez en un homenaje a las víctimas de la dana. La gente quedó bastante impresionada: es como escuchar a los Ramones cantados por una chica. Ha tenido muy buena acogida en plataformas digitales en apenas dos o tres meses. La canción habla de ese momento en el que necesitas romper con todo para poder avanzar.

—¿Qué puede esperar el público de sus nuevos conciertos?

—Por encima de todo, nuestro objetivo es transmitir energía. Porque el grupo nació de la rabia, de tocar en balcones durante la pandemia, de la necesidad de expresarnos. Tenemos ganas de tocar en salas pequeñas, cara a cara con el público. Solo rock and roll, porque para nosotros es la única forma de salir de los problemas.