Una parte de la historia de España está en este rincón entre Vilches y Arquillos
La familia Jiménez Pasquau aún mantiene en pie una parte de la historia de España, el cortijo donde fue apresado en septiembre de 1823 el general Riego. Declarado liberal en el reinado del absolutista Fernando VII, Rafael del Riego y Flórez venía de Jódar, tras perder una batalla de esa guerra de guerrillas de aquella época en Sierra Mágina y se refugió en Sierra Morena en busca de conquistar tiempo para saltar a Portugal porque habían puesto precio a su cabeza. Su caballería necesitaba herraduras y cuando llegaron a Aquillos sus hombre, alguien lo delató. Murió dos meses después en Madrid, a garrote vil. El célebre y cambiado himno republicano de Riego es por él.
