Y estalla la guerra
La Cofradía Matriz de la Virgen de la Cabeza insta al Juzgado de Andújar a abrir un expediente para “inmatricular” el Santuario
Sorpresa mayúscula la que se llevó el Obispado de Jaén al recibir el escrito del Juzgado de Primera Instancia número 3 de Andújar. La sala ha abierto un expediente de dominio, a instancias de la Cofradía Matriz de la Virgen de la Cabeza de Andújar, para inmatricular los terrenos del Santuario. ¿Qué significa esta medida? En pocas palabras, se trata de un proceso para discernir quién es el titular del terreno y escriturarlo a su nombre que, de tener razón la Matriz, sería a su favor y no a la del Obispado, algo que ha cogido por sorpresa a la Diócesis, que no acaba de entender la postura.
Un expediente de dominio, como es el caso que ocupa, se pone en marcha siempre a instancias de una parte. En este procedimiento, es un juez el que se encarga de determinar si el terreno o la finca objeto de litigio —en este caso la parcela de la Basílica Menor de La Morenita— se puede inmatricular a favor de quien ha iniciado el expediente registral, es decir, de la Cofradía Matriz de la Virgen de la Cabeza. Lo hace, una vez examinado el expediente y escuchados los testigos aportados por el interesado. Este trámite de domino concluye con un auto judicial que es susceptible de inscripción en el Registro de la Propiedad. En el caso del expediente abierto por el Juzgado de Andújar, lo que se ha hecho ahora es publicar un edicto —en la edición de ayer de este periódico— en el que se da un plazo de diez días para que todas aquellas personas que puedan verse afectadas por la escritura solicitada por la Cofradía aleguen aquello que consideren oportuno en su defensa. Se determina cuál es la parcela objeto de litigio que, en este caso, es una superficie de 5.353 metros cuadrados que consta de diversas edificaciones, entre ellas el propio Santuario, las viviendas adosadas así como los aparcamientos, epicentro de la Romería de la Virgen de la Cabeza. En la actualidad, esta parcela figura en el Catastro a favor del Obispado, según reza en el citado edicto.
Así las cosas, se han puesto en marcha diferentes procesos para analizar las consecuencias de la decisión tomada por la Cofradía Matriz de la Virgen de la Cabeza. Según ha podido saber este periódico, hay varias alternativas sobre la mesa, hasta tal punto que no se descarta “intervenir” la cofradía. La decisión supondría apartar a la actual junta directiva y que el Obispado tomara las riendas de una institución con siglos de historia.
Mientras tanto, ambas partes mantienen un silencio absoluto con respecto a la polémica de los últimos días y que tiene su origen en el 788 aniversario de la Aparición de la Virgen de la Cabeza. Tanto es así que el Obispado asegura que será a través de un comunicado, que se remitirá a todos los medios, como aclarará cuál es su opinión con respecto a todo lo acontecido y la decisión que tome, una postura que también deberá comunicar a la Matriz.
El Juzgado de Instrucción número 1 de Córdoba admitió a trámite, a primeros de años, una denuncia que interpuso un concejal de Unión Cordobesa (UCOR) en el Ayuntamiento, Carlos Baquerín. Acusó a la Diócesis, al obispo, Demetrio Fernández; al cabildo catedralicio y a su presidente, Manuel Pérez Moya, a los miembros de la Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento y al alcalde, José Antonio Nieto, de la situación de las inmatriculaciones de la Iglesia en la capital cordobesa de inmuebles “de aparente naturaleza pública”. La Iglesia registró a su nombre, en 2006, la Mezquita como catedral de Córdoba. Sin embargo, en verano, los tribunales decidieron archivar las denuncias presentadas contra las inmatriculaciones de la Diócesis al entender que no existía contenido penal ya que la inscripción de bienes inmuebles por parte de la Diócesis está amparada por la Ley Hipotecaria, según dijo el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. En este caso, los tribunales sentenciaron que la Mezquita era, legalmente, propiedad de la Diócesis de Córdoba. El proceso guarda algunas similitudes pero, esta vez, el expediente busca inscribir el Santuario a nombre de la Matriz.