Un tremendo ejemplo de amor

Valdepeñas de Jaén aplaude el primer caso de un trasplante de riñón en vivo entre dos de sus vecinos. La operación se realizó, con éxito, en el Hospital Virgen de las Nieves de Granada. La historia es un ejemplo de solidaridad y amor. Mari Sánchez Castro ofreció una parte de ella para salvar a su hermano. No dudó en donar su riñón para darle vida a Francisco Sánchez Castro. Los vecinos aplauden el gesto de esta valdepeñera que, con valentía, demostró tener un corazón que no le cabe en el pecho, movida por la ilusión de ver a su hermano recuperado. La compleja intervención se prolongó durante varias horas, para sufrimiento de la familia, pero al concluir, los doctores, satisfechos, transmitieron a los seres queridos de los dos jóvenes que son optimistas con el resultado positivo. Y es que, lo más importante, como explicaron los facultativos, es que los dos pacientes salieron bien del quirófano y se encuentran en perfectas condiciones. Ya más tranquilos, se recuperan en el complejo hospitalario granadino. Ellos declaran tener un grato recuerdo de esta experiencia, muy bonito, a pesar de la gran preocupación que supone pasar por un sala de operaciones. Sus familias los apoyaron desde el primer momento que se plantearon el proceso de trasplante. Dicen que son para ellos unos auténticos héroes y un ejemplo para todos sus vecinos.

Ante una decisión de este calado, tanto el donante como el receptor y sus familiares, tienen que saber que el trasplante de donante vivo solo estará justificado y será aceptado después de un riguroso estudio de riesgos y beneficios para los dos implicados, además de someter la intervención a una exhaustiva evaluación de acuerdo con los mejores estándares éticos.

La información es fundamental en este proceso. Todos los agentes implicados reciben previamente, y con todo detalle, datos de interés a cerca del tipo de estudios que acreditarán, la viabilidad y la seguridad de la donación.

Eso sí, la experiencia mundial acumulada tras más de 50 años, según los expertos, permite ofrecer una elevada seguridad si se da este paso. Asimismo existe unanimidad sobre que la mejor supervivencia de injertos y pacientes en trasplante renal se da cuando el riñón procede de un donante vivo.