Un “quijote” en la batalla por visibilizar la diabetes

Miguel Ángel Palomino, un residente en Torredonjimeno, reclama que se cumpla el plan integral de la enfermedad

26 feb 2017 / 11:25 H.

Hay gente que utiliza sus vacaciones para viajar. Miguel Ángel Palomino, un monitor de gimnasio vecino de Torredonjimeno, lo hace de una manera diferente. Hasta el 14 de marzo cubre una ruta a pie de unos 780 kilómetros, con llegada en Vila Real de Santo António (Portugal), dentro de una campaña para visibilizar la diabetes y que se cumpla el plan integral referente a esta enfermedad aprobado por todos los partidos representados en el Parlamento de Andalucía. La salida, en el municipio almeriense de Vera, contó con una grata compañía. Hizo de anfitrión el edil de Deportes, Pedro Gallardo, y entre los acompañantes de Jaén se hallaban la presidenta de la asociación ADEN, Celia Quirós, y dos niñas muy especiales, las mellizas tosirianas Lucía y Marta Águila, dos pacientes de la dolencia.

Con tal inyección de ánimo emprendió su itinerario Palomino, quien, en todo momento, va acompañado de dos perras, Leia y Kenya. La idea es caminar cada día siete u ocho horas, con un mínimo de cuarenta kilómetros por jornada. Por ejemplo hoy, todavía en Almería, va desde Aguamarga hasta San José, en la zona del Cabo de Gata. La marcha es similar al “canicross”. A veces, Miguel Ángel Palomino anda y otras, corre. El itinerario bordea las costas mediterráneas y atlánticas, con paso también por territorios de Granada, Málaga, Cádiz y Huelva.

Los preparativos contemplan pernoctaciones en cámpines, albergues y pabellones. “Siempre dormiré donde también puedan hacerlo las galgas”, explica Palomino. En su periplo se reúne con responsables municipales y de colectivos sociales. Por ejemplo, mañana ofrecerá una rueda de prensa en Almería capital y, ya en el mes de marzo, será recibido por el alcalde de la ciudad de Cádiz, José María González, “Kichi”.

La iniciativa por la que lucha Palomino se denomina “Quixocan”. Se trata de un nombre surgido de la fusión entre la forma antigua de escribir Quijote y la palabra latina para perro, en referencia a sus compañeras de viaje. “Es un proyecto altruista y autofinanciado. Cada año quiero darle voz a alguna enfermedad”, indica el jiennese, quien detalla que el pasado verano ya rompió una lanza por Celia, una menor de Jaén aquejada de una dolencia rara. “Las hijas de uno de mis mejores amigos tienen diabetes, un problema que afecta a más gente de la que pensamos”, menciona, para abordar por qué se decanta por este mal en concreto en 2017. Antes de partir, el tosiriano de adopción entrenó a conciencia para que la ruta saliera a la perfección.

Aparte de la sensibilización y de la visibilización —de “hacer ruido”, en palabras del promotor de la idea—, la campaña pretende recaudar fondos para mejorar la vida de los pacientes, por ejemplo a través de los campamentos diabetológicos. Por ello, a través del perfil de Facebook “Hoy Toca Ser Feliz” se venden camisetas.