Un hombre rescata a su padre de 75 años en un incendio en Villacarrillo
El suceso tuvo lugar sobre las 10:00 horas en el número 10 de la calle Chilluévar
La mañana de este sábado se ha producido un incendio en una casa situada en el número 10 de la calle Chilluévar que ha destrozado parcialmente una de las viviendas del inmueble compuesto por dos pisos. Afortunadamente no ha habido que lamentar daños personales aunque sí ha sido necesario que los servicios médicos de las Urgencias de Villacarrillo, atendieran a unos de los moradores tras ser rescatado in extremis por su propio hijo.
Comenzó pasadas las 10 horas cuando al parecer, P.R.M. de 75 años de edad, se encontraba en el comedor anexo a la cocina de su piso. en ese momento se encontraba solo en el piso pues su esposa había salido a hacer la compra a un supermercado. En la vivienda superior de la segunda planta vive el hijo del matrimonio, Francisco Requena, que en ese momento se encontraba descansando en la cama.
Según relata, comenzó a escuchar que llamaban insistentemente al timbre desde la calle, por lo que se levantó para asomarse por la ventana para comprobar quien era, cuando al salir al descansillo del piso, “escuché a mi padre como me estaba llamando, mientras que el hueco de escaleras comenzaba a llenarse de mucho humo”. En la calle quien llamaba era una vecina que tiene su casa por la parte trasera a la del suceso, la cual vio desde su ventana que da a los patios, que desde la casa de los vecinos salían llamas y mucho humo, por lo que corriendo acudió a alertar de lo que estaba sucediendo. Francisco bajó de inmediato para socorrer a su padre y entró a la vivienda que se había llenado de humo, “no veía nada, me tuve que tapar como pude la boca y nariz para no tragar humo y solo escuchaba a mi padre llamarme”, decía el hombre tras la extinción del fuego, todavía alterado por lo que había vivido en unos minutos que se le hicieron eternos.
La Policía Local llegó de inmediato, asegura el vecino, “un poco más tardaron los bomberos que venían de Úbeda, aunque es normal porque están a más de 30 kilómetros, pero tardaron lo justo de avisar y hacer el trayecto hasta llegar aquí”, afirma Francisco, visiblemente afectado por lo sucedido.