Testigo incómodo de conflictos
Gervasio Sánchez abre un seminario que pretende poner en valor el periodismo y la libertad de prensa
En el marco del seminario “La primera víctima siempre es la verdad”, organizado por el Centro Asociado a la UNED “Andrés de Vandelvira” de la provincia de Jaén, en colaboración con la Fundación Huerta de San Antonio (FHsA) y Reporteros sin Fronteras, el fotoperiodista y miembro de la junta directiva de RSF, Gervasio Sánchez Fernández protagonizó en la jornada de ayer dos citas en la ciudad de Los Cerros.
La primera se celebró en San Lorenzo y contó con la presencia y participación de alumnos de Bachillerato del IES “Los Cerros”. Un encuentro en el que Sánchez Fernández quiso que los jóvenes fueran conscientes de la realidad que les rodea, donde 80 países viven en conflicto y sufren a diario todo tipo de violencia. Por lo que les invitó a mirar con otros ojos a quienes hacen miles de kilómetros para escapar de las situaciones que sufren, pues como indicó el fotoperiodista, hay jóvenes que no saben que es vivir en paz en su país. Por ello les instó a ser generosos y ampliar su campo de visión sobre el mundo.
También les hizo ver la suerte que tienen de haber nacido en España, pues si hubieran nacido en Sierra Leona, las chicas serían con toda probabilidad esclavas sexuales, ya que las féminas sufren más las guerras que los hombres.
La segunda cita tuvo lugar en el salón de actos de la UNED, a las 20:00 horas, donde Gervasio Sánchez impartió una ponencia titulada: “Las guerras no acaban cuando dice Wikipedia. ¿Para qué sirve la fotografía de conflicto? ¿Es importante que los conflictos sean cubiertos por fotógrafos y periodistas? ¿Cómo ha evolucionado la prensa en los últimos 30 años?”.
Las imágenes fueron protagonistas de ambos encuentros, pues a juicio del conferenciante, sirven para profundizar en el mundo irreal en el vivimos, un mundo de tranquilidad, sin problemas, con pocos compromisos, mientras que hay muchas personas en el mundo viviendo en condiciones infrahumanas, gente que vive toda la vida como refugiados, o que topan con maquinarias de poder interesadas en llevarse la riqueza.
El periodista debe ser un testigo incómodo de la realidad, pues a su modo de ver, uno de los problemas graves de este país es ver cómo los periodistas se relacionan con el poder político y económico hasta el punto que no existe un buen periodismo, permitiendo una mayor manipulación, debemos ser vigilantes de estos poderes no de los que se acuestan con los poderosos.
La fotografía recoge el drama y es testigo del fracaso de la humanidad, por eso es tan importante mostrar las consecuencias a corto y largo plazo de los conflictos armados, señaló Sánchez. De hecho, ahora trabaja en un documental que tiene como protagonistas a los niños que fotografió en la Guerra Bosnia-Herzegovina y del cerco de Sarajevo, cuyas consecuencias siguen presentes en la sociedad 25 años después.