Los salesianos recuerdan a César Fernández
Iniciados los trámites para la beatificación del misionero
El pasado 15 de febrero, la comunidad salesiana recibió una noticia trágica: El asesinato del misionero Antonio César Fernández. Hecho que sucedió a cuarenta kilómetros de la frontera sur de Burkina Faso, tras recibir tres disparos, al parecer, durante un ataque yihadista. Los terroristas detuvieron el vehículo en el que viajaba el salesiano español con otros dos togoleses. Durante una media hora registraron el vehículo y, después, se llevaron a Antonio César hacia el bosque, lugar en el que lo asesinaron.
Desde ese momento, son muchas las muestras de cariño y admiración que ha recibido tanto la congregación salesiana como la familia del finado. Así, el colegio Santo Domingo Savio acogió la pasada semana una serie de actividades relacionadas con la vida y obra del sacerdote. En concreto, recibió la visita de los salesianos Paul Kossi y Didier Meba, así como de una hermana del padre César Fernández, Patricia Fernández, que compartieron con los asistentes anécdotas vitales que vivieron junto a Fernández y la labor que durante los años, que fue misionero en África, hizo.
Meba recordó como lo formó y compartió con los asistentes algunos momentos vividos junto al padre César Fernández. Lo recordó con mucho amor, cariño y admiración. Muchas eran las ideas que se agolpaban en la mente de Didier Meba, que resumió a los asistentes con una frase de los Hechos de los Apóstoles: “Paso su vida haciendo el bien, porque Dios estaba en él”. Por su parte, Patricia Fernández recordó que, desde pequeño, su hermano decía que quería ser misionero.
Una visita muy especial para honrar la memoria del salesiano cuyos compañeros de congregación pretenden seguir con los proyectos que el padre César Fernández tenía previsto realizar.