Canto festivo a la esencia propia

La Feria de San Pedro y San Pablo consume sus primeros días de celebración

28 jun 2019 / 17:49 H.

Los años pasan, y, con ellos, las generaciones de tosirianos, y aunque es inevitable que algunas costumbres caigan en el olvido, hay algo que los habitantes del municipio han sabido transmitir de padres a hijos a lo largo de las décadas: el especial cariño por la Feria de San Pedro y San Pablo. Si en sus orígenes se celebraba sólo en honor de uno de los santos —debate surgido en los últimos años— es irrelevante. Lo que importa es sentir de nuevo un singular cosquilleo al posar el primer pie en los escalones principales del parque municipal y el latido que se mantiene ahogado hasta que se llega a la explanada y ve uno que ahí siguen los “cachuchos” de toda la vida —el “Látigo”, el “Sapito”, la “Nube”...—, es decir, experimentar el retorno efímero a la infancia.

Todo ello era lo que podía leerse en las caras de los cientos de tosirianos que, como cada año, se apiñaron en torno a la entrada del citado parque municipal, tras el tradicional pasacalles de la banda de música Asociación Cultural Don Ximeno y la Banda de Cornetas y Tambores del Rescate, para no perderse el alumbrado oficial, que se celebró el pasado miércoles y que corrió a cargo de Manuel Delgado Palomino, “Lolo”, persona muy conocida y querida en el municipio. La nueva Corporación Municipal presidió el acto.

Este 2019 la programación no presenta novedades sustanciales con respecto a la de los últimos años. Fran Ureña, el ya exconcejal de Cultura y Festejos, que se despidió cerrando la organización de esta feria, quiso apostar, no cabe duda, por la continuidad y evitar el riesgo. Desde el primer día, dedicado a los más pequeños, hasta el 1 de julio, los tosirianos disfrutarán de actuaciones —como las de las orquestas Moonlight, que tuvo lugar ayer, y la Tentación, y el grupo Celtas Cortos, el sábado— y actividades infantiles y lúdicas, como el ya ineludible “Humor Amarillo”. No faltarán tampoco los pasacalles cabezudos de Tintín y La Charanga del Pueblo, que comenzaron ayer por la mañana. Así, una vez servidos los ingredientes, lo único que queda es disfrutar de la feria.