Las cooperativas San Francisco y San Pablo se fusionan para sumar fuerzas

Las cooperativas oleícolas San Francisco, de Arroyo del Ojanco, y San Pablo, de la pedanía Camporredondo, perteneciente al municipio de Chiclana de Segura, aprobaron la integración de la segunda en la primera, con un apoyo superior al 98% de los socios. La sociedad resultante mantendrá el nombre de San Francisco y será presidida por Francisco Javier Torres Sánchez, su actual responsable. San Pablo aporta 55 socios, 1,5 millones de kilos de aceituna y 850.000 euros de facturación, mientras que en caso de la otra entidad son otros setecientos socios, dieciséis millones de kilos de aceituna y nueve millones de euros de facturación. Por tanto, la nueva cooperativa San Francisco, fruto de esta fusión, queda compuesta por 755 agricultores, los cuales, con 17,5 millones de kilos de aceituna, producirán unas 4.000 toneladas de aceite de oliva y rondará los diez millones de facturación. Entre sus objetivos está intensificar la prestación de servicios a los socios, que pasan por la tramitación de ayudas europeas y la compraventa de insumos como carburantes y fitosanitarios.

Ambas cooperativas, en línea con los objetivos estratégicos de la federación estaban ya integradas en la entidad de segundo grado Olivar de Segura, que aglutina a 13 almazaras, 4.500 agricultores y 30.000 hectáreas de producción, las cuales generan una media de 20.000 toneladas de aceite de oliva anuales y unos 40 millones de euros en facturación. Después de la fusión continuarán dentro.