La Navidad se llena de copla

Espectáculo con Juan Luis Martínez, Carmen Carmona y Paqui Gálvez

22 dic 2016 / 10:03 H.

Navidad de copla” desembarca el jueves 29 de diciembre en el municipio de Puente de Génave, con la presencia del cantaor Juan Luis Martínez Campayo, vecino del municipio. Estará acompañado por dos compañeras que, junto al puenteño, participaron en el programa “Se llama Copla” de Canal Sur Televisión: Carmen Carmona y Paqui Gálvez.

El salón de actos “Faustino Serrano” del edificio Siglo XXI acogerá, a las 20:30 horas, el espectáculo coplero de Navidad, con la interpretación de diferentes temas por parte de los tres cantantes, que estarán dirigidos por el maestro José Miguel Álvarez, director de orquesta del programa televisivo. Un concurso musical dedicado a la interpretación de canción española y copla. Las entradas para el concierto en venta anticipada tienen un precio de 11 euros, 12 en el caso que se adquieran durante el mismo día que se celebrará el concierto, y una parte de la cantidad recaudada se destinará a la Asociación Helpnepal.

Cruceros. El artista de Puente de Génave Juan Luis Martínez Campayo acudió este año a una prueba para embarcarse en un nuevo proyecto musical. La naviera Pullmantur lo seleccionó como cantante para la puesta en escena, a diario, de un espectáculo de canción española en sus barcos de crucero. Un periplo por el mar, desde mayo hasta noviembre, que Juan Luis Martínez califica como impresionante: “Trabajar y, al mismo tiempo, disfrutar con lo que haces es genial. Se puede considerar que la primavera, el verano y el otoño son tres estaciones que he vivido durante una larga navegación y en lugares tan distintos como los Fiordos noruegos, el Caribe, el Mediterráneo, la zona del Báltico, Dinamarca, Londres y Alemania, entre otros destinos”. Turismo y cante, unidos de la mano, que le han permitido llevar su arte por todo el mundo: “Tardes y noches, en varios lugares del barco, como el teatro o el bar de 360 grados, son los momentos y las zonas en las que cantaba a diario. En este sentido, el ‘atryum’ o el hall del barco, acompañado del pianista, el guitarrista y la percusión, presentaban una estampa irrepetible donde expresar mi canto ante gente que disfrutaba de sus vacaciones. Cada jornada parecía diferente”.