Robos en Santa Elena con las víctimas dentro de sus casas

Escuché cómo trasteaban en la cerradura y, al principio, pensé que eran mis hijos que llegaban tarde. Luego me di cuenta de que no era fin de semana y supe que algo ocurría. Bajé, abrí la puerta de la casa y allí estaba en el patio. No se cómo, pero logró saltar la valla de un salto, pero decidí salir tras él, casi lo cojo”, es el testimonio de un vecino de Santa Elena, Juan Fernández, empleado de mantenimiento del Ayuntamiento que no se lo pensó dos veces y, en plena madrugada, tuvo la determinación no solo de frustrar el robo en su hogar, sino salir en busca del autor al volante de su coche y de avisar a la Guardia Civil e impedir nuevos asaltos a las viviendas de sus paisanos. Los hechos ocurrieron sobre las cuatro de la madrugada del miércoles al jueves. “La patrulla llegó en 10 minutos, hay que reconocer su eficacia”, explica el alcalde, Juan Caminero, que explica que los agentes fueron los que, tras una primera inspección por el entorno de la calles Francisco Tomás y Valiente y alrededores, comprobaron que había puertas forzadas. “Fueron los propios guardias civiles los que informaron a algunas de las víctimas de que habían entrado en su casa mientras dormían”, deja claro el regidor.

Y es que, el hecho de que los cacos se movieran a sus anchas por el casco urbano santaelenero, donde viven menos de mil personas, y todos se conocen, es lo más inquietante de lo ocurrido. “Ha habido hechos así, pero en cortijos y zonas más alejadas del pueblo”, admite el máximo responsable municipal que no oculta que está indignado y preocupado. Ayer por la tarde se habían presentado media docena de denuncias, que investigaba la Benemérita. Agentes de la Policía Judicial del Cuerpo acudieron a las casas para recoger pistas. También tuvieron trabajo los cerrajeros, ya que los afectados se apresuraron en arreglar los cierres para que los inmuebles no quedaran expuestos. Solo en el colegio Carlos III se forzaron ocho cerraduras. Allí los autores se hicieron con unos setecientos euros, además de equipos informáticos. El dinero lo habían recogido los alumnos de los últimos cursos del centro para organizar su primer viaje de fin de curso. “Es una pena, pero no creo que tengan problema en recuperarlo, porque el colegio y el resto de dependencias municipales están asegurados. Si no, lo ponemos entre todos, no se van a quedar sin excursión”, asegura el alcalde.

Los sigilosos autores, aparte de darle un disgusto a los adolescentes de Santa Elena, también entraron en la casa de una concejal del equipo de Gobierno, Nuria Jurado, que es la segunda vez que sufre un robo en su domicilio. En otro de sus golpes, los cacos llegaron a vaciar la nevera de sus víctimas, mientras estas dormían, o se llevaron hasta un paquete de tabaco, además de lo que había en la cartera. A una pareja, que regresaba de pasar unos días de vacaciones, los ladrones le abrieron las maletas, que habían decidido deshacer tras descansar. Se encontraron los bultos desordenados en la entrada de su vivienda. Juan Caminero confía en que la investigación de la Benemérita avance y dé pronto resultados y da las gracias por el hecho de que ninguna de las víctimas tuviera un altercado con los autores. “Eso hubiera sido mucho peor, al menos nadie ha resultado herido”, reflexiona el alcalde.