“No” rotundo al cierre de dos unidades de Infantil

Ayuda. Esto es lo que piden desde los ayuntamientos de Orcera y Benatae, junto a los ampa “Picorzo” y “San Ginés”, ante el anuncio del cierre de dos aulas de Infantil en el Colegio Santa María de la Peña, que cuenta con dos centros en los dos municipios citados.

El alcalde de Orcera, Juan Francisco Fernández, y la alcaldesa de Benatae, Francisca Espinosa, denuncian dicho cierre y exponen que, en los dos casos se perdería una línea de Infantil. Actualmente, en Orcera hay 3 aulas de Infantil (3-4-5 años) que quedarían reducidas a 2, mientras en que Benatae cuentan con 2 aulas que quedarían reducidas a solo una. “¡Ayuda! No al cierre de unidades del Colegio Rural Santa María de la Peña de Orcera, Benatae y Segura”. Así de claro lo expresan en una imagen difundida a través de las redes sociales.

Fernández y Espinosa muestran su “indignación” por este “golpe” a la educación pública, el cual viene a “mermar los recursos y a empeorar la calidad de la enseñanza”. “Las familias de Orcera y Benatae no se merecen este desprecio del Gobierno andaluz de PP y Ciudadanos”, añaden en un comunicado remitido por el PSOE.

De esta forma, exigen a la Consejería de Educación que “dé la cara y ofrezca las explicaciones oportunas por esta decisión injusta, que recorta en la educación donde más duele, es decir, en los colegios del medio rural”. En este sentido, indican que la Consejería debería explicar “cómo va a recomponer las unidades si definitivamente cierra esas dos aulas”, por lo que le exigen que “informe con luz y taquígrafos para que las familias sepan a qué atenerse”.

“La educación es un pilar fundamental en nuestros pueblos, donde estamos haciendo un gran esfuerzo para fijar la población al territorio. Estos esfuerzos serán inútiles si PP y Ciudadanos se dedican a deteriorar la educación pública y a desmantelar nuestros centros escolares”, advierten ambos dirigentes locales. Juan Francisco Fernández y Francisca Espinosa garantizan en un comunicado que van “a pelear hasta el último minuto para impedir este recorte” y, desde luego, seguirán denunciando este “ataque” con la “mayor de las insistencias”, porque, según dicen, no pueden “consentir que el edificio de la educación pública en el medio rural, que tanto trabajo y tantos años costó levantar, pueda venirse abajo por el acoso y derribo de los partidos de derechas”.