“Ni nuevos ni viejos, socialistas”

Susana Díaz promete que el PSOE “estará a la altura” con Pedro Sánchez en La Moncloa

16 dic 2015 / 09:21 H.

Unos egipciacos salones de boda, con una nada sobria decoración inspirada en la civilización de los constructores de pirámides, fue el lugar elegido por el PSOE para organizar su “gran acto” de Juventudes Socialistas en Andalucía. La “actuación estelar” fue la de la carismática secretaria general del partido de la rosa en la región, la presidenta de la comunidad, Susana Díaz, a la que acompañaron los máximos responsables de JJ SS en Andalucía y Jaén, José Carlos Durán y Juan Francisco Serrano, respectivamente; el secretario general del PSOE de Jaén, Francisco Reyes, y la presidenta nacional de esta fuerza, la iliturgitana Micaela Navarro. Todos ellos, presentados por el alcalde de Jódar, el anfitrión José Luis Hidalgo, que, literalmente, se quedó ronco con una arenga en la que reclamó para el próximo domingo de elecciones generales: “No os paréis ni a ducharos, cuando lleguéis de la aceituna, ¡a votar!”. El mitin estaba anunciado como un encuentro sectorial sobre jóvenes, lo que le sirvió al PP para criticar que el paro en este sector de la población roza el 70% en varios municipios; pero el acto no fue eso, sirvió como aviso a los simpatizantes, para que así lo trasladen a su círculo de indecisos, de que la victoria de los socialistas dependen en gran medida de la movilización.

La “presidenta, presidenta” Susana Díaz, como la suelen recibir, puso los puntos sobre las íes con el propósito de lograr que los suyos saquen la cabeza en el actual panorama político nacional, donde al PSOE le mojan la oreja, con propuestas que llegan de la mano de Ciudadanos y Podemos y que pueden arrebatarle papeletas. “No somos ni nuevos ni viejos, somos socialistas”, argumentó la líder andaluza, que basó su entusiasta intervención en recordar los logros del PSOE desde su fundación por Pablo Iglesias, que como se dejó claro, nada tiene que ver con el candidato de la formación del círculo, allá por 1879. Citó hitos como la asistencia sanitaria para trabajadores, un logro que atribuyó a otro de los padres del partido, el médico Jaime Vera, y luego la prestación sanitaria universal, que echó a andar, como recordó, de la mano del ministro Ernest Lluch y Felipe González; además de la aprobación del matrimonio universal, que se debe al Gobierno que presidió José Luis Rodríguez Zapatero. Ante el peso de una historia que dio como resultado “el derecho a tener derechos”, tal y, como apostilló Micaela Navarro, Susana Díaz cargó con insistencia contra el partido del actual Pablo Iglesias, al que definió como “una izquierda que predica, pero no da trigo”, como sí hacen, según ella, los socialistas. Sobre el mantenimiento del modelo económico que propugna el presidente popular Mariano Rajoy y en el que también basa su discurso la fuerza naranja de Albert Rivera, Díaz pintó un escenario con “ancianos becarios y jóvenes en paro”. A los presentes también les solicitó que ayuden a su partido a evitar que continúe el vaciado de la “hucha de las pensiones”. “Vamos a volver a estar a la altura en 2015, de la mano de Pedro Sánchez”, prometió. Díaz, antes de lanzar sus propuestas y atacar a sus rivales a derecha e izquierda, tuvo unas palabras dedicadas a José Manuel Campos, el alcalde de Rus, fallecido el pasado 24 de noviembre, a cuyo entierro asistió. Con los “Rolling Stones” socialistas actuó un telonero que también se ganó al millar de personas del público, fue Eduardo Madina, que sonó como candidato a La Moncloa. Madina elogió el vigor del socialismo provincial y habló de que en Madrid es conocido el “estilo Jaén” de vivir una campaña electoral. Sobre el 20-D, pidió dejar en la oposición a un PP al que acusó de tratar de crear “un país tacheriano y conservador que en nada se parece a la gente”.