Medio siglo navegando en la Sierra de Segura

Hoy se cumplen 50 años de la fundación del Club Náutico Guadalmena, referente de la actividad acuática

26 may 2020 / 16:37 H.
Ver comentarios

Con el verano a la vuelta de la esquina y la posibilidad de viajar a zonas costeras durante la época estival sumida en la incertidumbre, este año más que nunca es necesario recordar que, no sólo disfrutar de un chapuzón, sino también navegar es posible en la provincia. Uno de los enclaves que lo hacen posible es el embalse del Guadalmena, entre las comarcas de la Sierra de Segura y El Condado. Al socaire del mismo nació el Club Náutico Guadalmena, de cuya inscripción como asociación deportiva se cumple hoy mismo medio siglo.

El Club Náutico Guadalmena ha resultado clave en la promoción de los deportes acuáticos en Jaén desde su fundación, que tuvo lugar en 1970 gracias a Manuel Ardoy Medina, su primer presidente, “que luchó por hacer realidad la visión de que en un enclave deshabitado y apartado del mundanal ruido había cabida para el hermanamiento de el deporte y naturaleza”, según explica la actual dirigente del club, Francisca María Guerrero Villar.

La presidenta señala que la construcción del citado embalse en 1969 supuso “una explosión de modernidad en un entorno rural que recogió todo lo positivo de las familias de ingenieros, aparejadores y el resto de personal cualificado que se afincaron en dicho enclave durante la década de construcción de la obra civil”. Ardoy, natural de Beas de Segura, “supo valorar ese momento tan especial de trabajo en equipo”, explica Guerrero. Así lo refleja, de hecho, la frase de la carta encíclica “Populorum Progressio” que luce en la propia presa: “El trabajo une las voluntades, aproxima los espíritus y funde los corazones; al realizarlo, los hombres descubren que son hermanos”. La creación del Club Náutico no fue sino una forma de dar continuidad lúdica a aquel espíritu de convivencia que hoy permanece vivo.

Actualmente, en el entorno del río Guadalmena conviven ciervos, zorros, garduñas, tortugas, erizos y garzas negras con lucios, carpas y truchas, pero también con veleros, lanchas motoras y piraguas, “y, aunque parezca increíble, todo en perfecta armonía”, asegura la presidenta del club. Las tres generaciones de socios que han formado parte de la entidad durante estos 50 años, procedentes de diversos puntos del territorio español, han practicado disciplinas como vela ligera, windsurf y esquí acuático, y actividades lúdicas como paseos en barco.

La del Club Náutico del Guadalmena es, por lo tanto, la historia de un sueño hecho realidad por sus fundadores, a los que hoy la entidad recuerda y rinde un cálido y merecido homenaje.

Provincia