Oasis en el desierto demográfico

Dice el refrán que, en el país de los ciegos, el tuerto es el rey. Algo así ocurre con los datos demográficos de la provincia de Jaén, donde la mayoría de los municipios volvió a perder población. Según el último dato disponible, correspondiente al 1 de enero de 2019, Martos ganó ocho habitantes en comparación con el año anterior. De esta manera, la cifra quedó en 24.215. Se trata, sin duda, de un auténtico oasis en el conjunto del desierto jiennense.

Por sexos, había 12.012 varones y 12.203 féminas. Pese al leve repunte, la cifra total de residentes en el municipio de la Peña no es la más alta del presente siglo. El mayor volumen poblacional del periodo se consiguió en 2011, con 24.739. Sin embargo, es cierto que, desde entonces, el descenso ha sido mucho más suave que en la mayoría de lugares de Jaén.

Uno de los grandes alicientes para la situación en el municipio marteño es su dinamismo económico, sustentado principalmente en la industria, cuyo máximo exponente es la factoría de Valeo, de la que dependen numerosos empleos, directos e indirectos. A raíz de ese movimiento de puestos de trabajo, es posible un mayor consumo y un mercado inmobiliario más boyante que en otros puntos jiennenses. Asimismo, Martos cuenta con una de las rentas per capita más elevadas del conjunto de la provincia. Concretamente, figura en quinta posición, solo por detrás de La Guardia, la capital, Linares y Úbeda. La cantidad bruta, según el último dato —correspondiente a 2017—, es de 21.362 euros y 18.075 en concepto de renta disponible. Se encuentra en el puesto 81 de Andalucía. Las posibilidades de desarrollo, unidas a las buenas comunicaciones, de la mano de la autovía del olivar, hace que parejas jóvenes decidan asentarse en la ciudad.

El máximo de población conocido se registró, según aparece en la serie publicada por el portal Foro Ciudad, en 1950, con 30.404 personas. Después llegó un rápido desgaste fruto de la emigración masiva a Cataluña, otros puntos de España y el extranjero. En 1970 había censados solo 21.493 marteños. Después, se produjo una recuperación con altibajos. El nivel más bajo, 20.945, data de 1991. En los siguientes veinte años, la cifra de empadronados repuntó en casi 4.000. En esta recuperación tuvieron un papel fundamental la llegada de personas de otros municipios y de inmigrantes ante las oportunidades de trabajo. Los extranjeros, de las más variadas nacionalidades, representan en torno al 5% de la población. Predominan los inmigrantes llegados desde Marruecos, que suponen más del 40% de los foráneos.