Enamorados por y para el flamenco con muchas ideas

El proyecto “12 Palmas” abre la puerta al cante jondo a 130 personas de todas las edades

19 oct 2016 / 11:28 H.

Lucía Yeguas comenzó a bailar sevillanas a los cuatro años y a los seis ya demostró su interés por la práctica del flamenco. Pocos años más tarde tuvo el privilegio, como ella misma reconoce, de recibir clases de la gran artista local Carmen Laguna, con la que comenzó a colaborar en sus espectáculos. Fue precisamente en uno de ellos, la “Elegía Andaluza”, en la plaza de toros de Martos, donde entre los músicos conoció a Carlos Cañadas. Desde entonces viven juntos un proyecto que trasciende lo profesional. Este reconoce que la música siempre estuvo muy presente en su vida, pese a no tener tradición familiar y cuenta que a los catorce años recibió clases del linarense Luís Moreno, conocido como “El niño de la paz”.

A partir de ahí, él mismo se reconoce como un músico muy autodidacta, que siguió formándose gracias a la observación. Así le nació el interés por la percusión, otro arte en el que nunca deja de aprender. Dos enamorados por y del flamenco que aprovecharon la reforma de su vivienda para sacar una habitación que les sirviera de esparcimiento para la práctica de sus grandes aficiones y que más tarde decidieron emplear para impartir clases entre los vecinos de Martos. En 2012, comenzaron a trabajar con el proyecto “12 Palmas”, con 20 alumnos. “Fue una apuesta muy difícil”, dice Carlos Cañada, que juzga: “En Martos, a excepción de la Peña Flamenca, no parecía que hubiera mucha afición”. Para su sorpresa, después del primer Festival Flamenco de La Peña, que organizaron con los alumnos, duplicaron el número de alumnos, un hecho que se ha repetido de forma exponencial, hasta llegar a 2016. Y es que, actualmente, reciben clases 130 personas, de todas las edades, con los que han formado media docena de grupos de guitarra, uno de percusión y seis grupos de baile en los que participan alumnos desde los tres años. Lucía Yeguas también creó un conjunto de interpretación, en el que con el asesoramiento de compañeros psicólogos, trata de aflorar la expresividad de los alumnos más tímidos.

Pero el proyecto de “12 Palmas”, cuyo nombre hace referencia a los doce tiempos de la soleá flamenca, como aclaran sus impulsores, no se queda en las clases de este arte. Y es que, además del tradicional Festival Flamenco de La Peña y la “Zambomba Flamenca” de todas las navidades, preparan una sorpresa para incluirla en la agenda cultural local.