Desarrollo de plásticos con restos de poda de olivo

    10 dic 2016 / 11:41 H.

    El Centro Tecnológico del Plástico y la Universidad de Jaén desarrollan un proyecto de I+D+i centrado en el uso de subproductos del olivar para mejorar las propiedades de los bioplásticos. La iniciativa, denominada Compolive, se centra en la utilización de fibras naturales procedentes del proceso de la poda del olivo para la fabricación de nuevos materiales de base polimérica.

    En los últimos años, las fibras naturales se convirtieron en una alternativa a las fibras convencionales. Y es que este material presenta propiedades técnicas satisfactorias, tiene un coste muy bajo, está ampliamente disponible y deriva de fuentes renovables.

    El investigador de Andaltec, Francisco Javier Navas, destacó que la integración de la fibra de olivo en un bioplástico no ha sido muy estudiada hasta el momento. “Estamos ante un producto que presenta un gran potencial en una provincia como Jaén, donde existe una industria del plástico muy potente y donde se generan cada año miles de toneladas de residuos procedentes de la poda de los 60 millones de olivos que hay plantados”, señaló.

    Asimismo, los investigadores de Andaltec y el grupo de investigación Bioprocesos de la UJA seleccionaron las fibras del olivo más adecuadas para este uso. Andaltec cuenta con una plantilla de 170 profesionales y más de 10.000 metros cuadrados de instalaciones en su sede central de Martos.