Maridaje de gastronomía y cerámica como colofón

La cita se cierra con dos actividades culinarias y un taller infantil

09 jun 2019 / 11:38 H.

Punto final. La cuarta edición de la Feria Internacional de Cerámica Artística Ciudad de Bailén quedó cerrada ayer después de tres días de intensa actividad. Desde que a las diez de la mañana del pasado jueves quedara inaugurada la cita una vez completado el acto institucional que acogió la sala de conferencias del Museo de la Batalla, han sido numerosas las iniciativas, tanto matutinas como vespertinas, que la ciudad ha albergado en torno al sector cerámico, que se erige en una de las piedras angulares en torno a la que se sostiene la economía bailenense. El objetivo, dar a conocer más acerca de este pilar local, pero también ofrecer oportunidades empresariales. No en vano, 29 empresas andaluzas han mantenido más de 170 reuniones comerciales con siete agentes in ternacionales para promocionar sus productos entre la feria bailenense y la cordobesa Enbarro, en La Rambla, celebrada también en estas fechas.

Ponencias, talleres, master class y otra serie de actividades han formado parte del programa preparado para este año, con la exposición de piezas de cerámica artística como hilo vertebrador. Precisamente con la apertura de la misma al público comenzó la jornada final de la feria. Desde las diez de la mañana y hasta las dos y media de la tarde, el Paseo de las Palmeras acogió a todas aquellas personas que aún no habían tenido la posibilidad de disfrutar de las piezas expuestas o que, sencillamente, encandilados tras completar su visita en los días previos, decidieron volver a pasar por la misma.

Entre las doce y las dos, de forma paralela, la actividad se intensificó. Los más pequeños de la ciudad fueron los protagonistas del taller Decoración sobre piedra y cerámica: cactus. Celebrado en la Casa de la Juventud bailenense, este curso “exprés” de arte cerámico fue impartido por David y Javier Rusillo Sáez. Además, los miembros de la Escuela Hacienda La Laguna abandonaron su habitual espacio en el Centro Profesorado Especializado hasta el Paseo de Las Palmeras. Allí, docentes y alumnos presentaron al público un proyecto que aunó la gastronomía tradicional bailenense y la creatividad del arte cerámico.

Tras ello, hubo poco tiempo para el descanso. A las seis y media de la tarde la muestra de piezas abrió sus puertas de nuevo al público, y ya no cerraría hasta la medianoche. El arte de hacer cerámica al aire libre fue el título del “workshop” de Antonio Barrales Comino junto a la Asociación de Alfareros Tradicionales, también en el Paseo de las Palmeras. Por último, los cocineros Miguel Ángel y Paco Simón, de Restaurante El Álamo y Salones Joker, ofrecieron su arroz al carbón y su costilla de cerdo a la brasa para lograr un nuevo maridaje entre gastronomía y cerámica para poner el broche de oro a la cita.