Lumbres para la Virgen de la Paz
Beas de Segura se vuelca con los actos religiosos y lúdicos de su patrona
Las tradicionales lumbres abrieron los actos en honor de la Virgen de la Paz, patrona de Beas de Segura. Todo el casco urbano lució con el resplandor de las hogueras, ya que fueron 131 las inscritas que se prendieron. A todas ellas, según comenta Mercedes Soria, alcaldesa en funciones, “el Ayuntamiento les ha entregado un kilo de panceta para que los vecinos lo celebren”. Aunque tradicionalmente el Ayuntamiento repartía cuerva, la bebida típica de Beas, desde hace un tiempo se dejó de hacer “porque, entre unas cosas y otras, no alcanzaba para todos y se pensó que con la panceta no había problema”, matiza Mercedes Soria. Las lumbres se prendieron en un ambiente festivo y lúdico hasta altas horas de la madrugada. La del Ayuntamiento, que al ser para todos fue la más voluminosa, se prendió en la Plaza de San Marcos. En las diferentes lumbres no faltaron las morcillas, chorizos, patatas asadas y bebidas como cerveza, vino, cuerva y mistela.
Hoy, a mediodía, tendrá lugar la misa en la parroquia en honor de la Virgen de la Paz. Diario JAÉN se suma a la celebración y repartirá con cada ejemplar del periódico una medalla de la venerada imagen. Este año, el trono de la Virgen estará adornado con más de 400 alelíes. Los días previos a la festividad tuvo lugar en la iglesia una novena en honor de la patrona. Por otro lado, la imagen saldrá en procesión a las cinco de esta tarde y recorrerá diferentes calles del municipio hasta llegar al santuario de La Villa.
historia. Estas fiestas en honor de la Virgen de la Paz son relativamente recientes. El 23 de noviembre de 1810 se incendió la iglesia parroquial y con ella la patrona del pueblo, Nuestra Señora de Gracia. Con el tiempo, aquella devoción fue olvidada. El 16 de septiembre de 1873, se inauguró la ermita de la Villa, con advocación a la Virgen de la Paz que fue, ese día, proclamada patrona. La imagen también fue sacada en procesión. Cada año se baja a la parroquia, del 17 al 24 de enero, para celebrar la novena y la procesión de regreso a la ermita el día 24.