Los coches eléctricos, el mayor reto de los talleres en el siglo XXI

Los mecánicos en la provincia afrontan el desafío con más dudas que certezas

14 sep 2024 / 09:33 H.
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Las carreteras de la provincia de Jaén, al igual que las del resto del planeta, están abocadas a experimentar el mayor cambio del siglo XXI con el sector de la automoción. Los vehículos de combustión tienen los años contados con la inevitable llegada de los coches eléctricos, que paulatinamente ya circulan ganando cada vez más espacio en un sector en el que están llamados a imponerse, relegando a los motores que funcionan con gasolina o diésel. No obstante, aún queda mucho tiempo para que se produzca esta global transformación en los automóviles y también para que la cifra de coches eléctricos supere a la de combustión, puesto que estos últimos vehículos no desaparecerán hasta que su vida útil finalice.

La vida de los coches de combustión suele oscilar entre los 10 o 15 años, lo que significa que los últimos modelos de coches de combustión que se vendan a finales de 2035 —último año para fabricar y comercializar— habrán cumplido su ciclo de vida para el año 2050. Sin embargo, ya con la aparición de los coches eléctricos, surgen muchas preguntas dirigidas al sector de la automoción: ¿están los talleres mecánicos preparados para reparar o llevar el mantenimiento que requieren los coches eléctricos?, ¿han asimilado su inminente llegada para dominar el mercado?, ¿los propietarios de los talleres mecánicos están afrontando en sus negocios los drásticos cambios que conlleva esta transformación? Son algunas cuestiones que van sujetas a las mejoras aplicadas en cada taller, al grado de innovación implementado en cada casa mecánica.

Lo cierto es que, más tarde o más temprano, todos están condenados a experimentar significativos cambios en sus instalaciones. En la provincia, actualmente, hay una red de unos 700 talleres que se dedican a la mecánica rápida, chapa y pintura, y cambio de neumáticos, entre otras prestaciones. Muchos de ellos, aunque de forma embrionaria, ya han iniciado la transformación hacía el vehículo eléctrico, pero la gran mayoría aún ve muy lejano este devenir en el sector. Los sistemas eléctricos son una prestación que los talleres mecánicos no desconocen, pues los coches cada vez están fabricados con mayor equipamiento eléctrico. A pesar de que los mecánicos van familiarizándose con los sistemas eléctricos, el novedoso motor sin combustión exige unos conocimientos que, a día de hoy, no dispone el grueso de los mecánicos en la provincia jiennense.

Los problemas más habituales entre los coches eléctricos están relacionados con el software y la electrónica, siendo los fallos en el sistema de infoentretenimiento, la conectividad y las ayudas a la conducción los más denunciados entre los propietarios. Los problemas en software son comunes en todos los coches nuevos, pero parecen agravarse en los eléctricos por la mayor complejidad de sus sistemas electrónicos. Los consumidores que optan por este tipo de vehículo esperan una experiencia de conducción superior y lo último en tecnología. Sin embargo, los problemas técnicos y de software están desmoronando estas expectativas. Y es aquí donde entran en juego los mecánicos. Según el Estudio de Calidad Inicial de J. D. Power 2024, de Estados Unidos, los vehículos eléctricos obtienen puntuaciones más bajas en calidad inicial que sus equivalentes con motor de combustión. Esto quiere decir que, si no se optimiza su funcionamiento, los mecánicos tendrán más trabajo del habitual. Porque, según afirma el mismo estudio estadounidense, los coches eléctricos dan más problemas que los de gasolina o diésel.

José Daniel Delgado: “El cambio es renovarse o morir”

Los coches eléctricos, el mayor reto de los talleres en el siglo XXI

Lidera el colectivo jiennense de talleres desde hace apenas cinco meses, pero es muy consciente de que los vehículos eléctricos transformarán muchos aspectos de la profesión de mecánico. Para adquirir los conocimientos que implica el cambio, el presidente aboga por los cursos formativos, que pronto comenzarán a impartirse desde la Asociación de Talleres y Afines “Sidero Jaén”.

—¿Cuántos socios aglutina el colectivo “Sidero Jaén”?

—Unos 350, aproximadamente.

—¿Es usted partidario de los vehículos eléctricos?

—No.

—¿Por qué motivo?

—Pienso que aún no están optimizados. Los que circulan ahora mismo por las carreteras suelen tener muchos fallos. No transmiten la confianza que aportan actualmente los vehículos de combustión. Es el principal motivo.

—¿Cree que los talleres de mecánica de la provincia de Jaén están preparados para esta transformación?

—La mayoría no. Pero creo que es un tema que va ligado a la oferta y a la demanda. Si no se venden demasiados coches eléctricos, seguimos reparando los de combustión. Porque son los que nos traen los clientes. Aunque hay que estar preparados, la evolución la marcarán los consumidores de vehículos eléctricos. A medida que vayan apareciendo más eléctricos, no quedará otra alternativa que actualizarse a los tiempos que marca la automoción.

—¿Qué porcentaje de talleres mecánicos en la provincia de Jaén podría llevar a cabo la reparación de un vehículo eléctrico en la actualidad?

—Menos de un 40 por ciento.

—También es propietario de un taller, ¿le ha llegado ya algún vehículo eléctrico para repararlo?

—Sí, unos cuantos. Han requerido un trabajo más minucioso que el que podría realizarse a un coche de combustión. Es decir, más tiempo y más cuidado. Son mucho más delicados.

—¿Supone mayor coste la reparación?

—Sí, porque el tiempo de mano de obra es mayor. También las piezas, porque, al ser novedosas, tienen un coste más elevado. Ya no podremos acudir a los desguaces para las piezas que exigen los motores de combustión, como hacemos habitualmente. Para eso tendrán que pasar muchos años.

—¿Cree que se implantarán nuevas tarifas en la reparación y mantenimiento de los vehículos eléctricos?

—Pienso que sí. Los materiales ya no serán los mismos. El funcionamiento de los motores eléctrico tampoco lo es. Como he dicho, el tiempo que hay que dedicar es superior. Si se trabaja más y los costes de los materiales son mayores, habrá que revisar nuestros honorarios.

—¿Qué cambios significativos tendrán que hacer los talleres mecánicos?

—Cambio de maquinaria y herramientas, sobre todo. Hay que dejar claro que los motores eléctricos son otro mundo, no tienen nada que ver con los de combustión. Las máquinas de diagnosis sufrirán una transformación acorde con lo que exigen estos motores. De momento, por lo que he tenido oportunidad de reparar, la soldadura es un aspecto importantísimo en la reparación de motores eléctricos. Los supresores de picos, un dispositivo diseñado para la protección de motores eléctricos, por poner un ejemplo. Hay que hilar muy fino porque protegen de voltaje y sobretensiones. Si no se aplica un buen trabajo, puede dañar o destruir su funcionamiento.

—De un modo u otro, ya trabajan con sistemas electrónicos. Aunque no se trate de motores, los coches fabricados en la actualidad cada vez cuentan con más electrónica.

—Sí, pero el motor es diferente. Los sistemas electrónicos que ya se ven en los coches de combustión son complejos y sus reparaciones, en muchas ocasiones, son un quebradero de cabeza. Un simple cable puede ocasionar múltiples fallos. Pero es que el motor eléctrico es otro mundo aparte, muchísimo más complejo. Está compuesto por muchas menos piezas móviles, sin caja de cambios convencional, y eso hará que aparezcan errores muy dificultosos. Tendrá un papel muy importante, como he dicho anteriormente, la soldadura.

—¿Cree que aparecerán nuevos talleres especializados en eléctricos?

—No lo creo. Ya hay talleres que reparan eléctricos. Y, para los que aún no prestan este servicio, no quedará otra opción que aceptar la transformación. El cambio es renovarse o morir.

—¿Es necesario implementar cursos formativos sobre estos vehículos para los mecánicos?

—Por supuesto. De hecho, desde “Sidero Jaén” lanzamos constantemente cursos formativos. Es uno de los servicios que ofrece el colectivo de talleres mecánicos y que sirve de mucha ayuda para nuestros socios. Una de nuestras próximas formaciones abordará de manera integral los vehículos eléctricos y, por ende, sus respectivas reparaciones. Estos cursos, con el paso del tiempo, coparán nuestro programa a medida que los vehículos eléctricos se vayan imponiendo en las carreteras. Es la forma más práctica para que la profesión se actualice.

José Luis Arboledas Fernández: “Prefieren los talleres de las casas oficiales”

Los coches eléctricos, el mayor reto de los talleres en el siglo XXI

El gerente del Taller Neumáticos Seminuevos Jaén aboga por el uso de los coches eléctricos según el uso que se les dé. Los ve apropiados para circular por ciudad, pero remarca que para viajes largos no los recomendaría por la autonomía que poseen. “Yo los utilizaría en ciudad, porque no emiten contaminantes locales. Y eso las ciudades lo agradecen. Pero sí que es cierto que no me fiaría de un eléctrico en carretera, donde verdaderamente se hacen kilómetros. Ahí es cuando se ve la eficiencia de un coche. Me quedo para este fin con el de combustión, porque el eléctrico te puede privar de tiempo y disponibilidad”, indica. Arboledas es consciente de que se están logrando grandes avances en los vehículos eléctricos, pero manifiesta que todavía queda mucho para sacar su máximo rendimiento. En el taller que dirige aún no han aparecido coches eléctricos para llevar su mantenimiento o reparación. Arboledas explica que los propietarios muestran recelo con los talleres convencionales de mecánica en general y que se inclinan por los talleres de las firmas donde los han adquirido.

No obstante, es habitual que el equipo de profesionales que capitanea repare vehículos híbridos. “Llevamos el mantenimiento básico: cambio de aceites, pastillas y neumáticos, entre otros servicios. Pero no tocamos la parte eléctrica. Para estos trabajos prefieren las casas oficiales”, manifiesta. En el aspecto formativo, Arboledas es tajante y resalta que los mecánicos aún no están preparados para afrontar el cambio. Por este motivo, el gerente aboga por la formación para actualizar los conocimientos de los mecánicos. “Estos vehículos requieren otra formación. De seguridad, por ejemplo. Especialmente al manipularlos por el tema de la alta tensión. Hay que tener unos conocimientos más avanzados de los que ponemos en práctica cada día”, explica Arboledas, que, por otro lado, destaca una ventaja de los coches eléctricos: “También es cierto que la potencia en los eléctricos es inmediata, no como la de un motor térmico, que necesita alcanzar determinadas revoluciones para llegar a la potencia deseada”.

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