Lola aprende matemáticas

Entre 40 y 93 años de edad tienen las mujeres, mayoría, que aprenden en la Sección de Educación Permanente (SEP) de Benatae, que tiene el nombre de Felipe Arche y forma parte del centro que agrupa a todas las secciones de la Sierra de Segura (Ceper), del mismo nombre. Resulta que el tope de edad lo pone Dolores Ruiz, Lola para sus compañeras y para todo el municipio. De los 93 años con los que mira y afronta la vida cada mañana, 30 no ha faltado ningún día al centro, donde aprendió a leer y escribir, además de conocimientos básicos. Ahora podría darnos clases de vida saludable, en la que se forma, y se afana con las matemáticas, a la que es muy aficionada. O podría enseñarnos cómo sed recupera el patrimonio cultura en un espacio rural como en el que viven.

Son dos líneas de conocimiento, sendos proyectos que se desarrollan en el SEP de Benatae, junto con el inglés y la informática para alumnos que ya tienen otra media de edad. El director de Diario JAÉN, Juan Espejo, acompañado por la jefa de estudios delegada del centro, Ana María Alcaide, compartió con ellos qué es el periódico y cómo se hace; la evolución tecnológica del proceso y, finalmente, el valor de las relaciones, el respeto y cuidado al medio ambiente y perseverar en los sueños. Ellos dan ejemplo exprimiendo ahora la oportunidad que no tuvieron de jóvenes.

Aquella escuela sólo para las niñas

Hace más de 70 años, muchas de las niñas de Benatae, algunas de ellas ahora alumnas del centro de adultos, pasaron por aquella escuela que segregaba en función del género. Lo recuerda Ángela García Navarro, que moviliza a sus amigas para buscar esta instantánea que retratan toda una época. Ángela —que no está en la fotografía—, recuerda los nombres de Simona y Manuela, pero también el de una maestra, doña Rosa, que era cordobesa. Escuela a la que fue Lola Ruiz —en la fotografía de la izquierda, y de la que Ángela puntualiza: “Entonces, los niños por un lado y las niñas por otro”.