Las calderas siguen vetadas en Villanueva a pesar de la mejoría
El municipio despide el año atmosférico con 41 días de emisión excesiva de PM10

El trabajo que se está haciendo está dando sus frutos, pero aún queda mucho camino que recorrer. Villanueva del Arzobispo no se libra de la prohibición de uso de calderas de biomasa lechosa y pélets de leña en cualquier aparato de calefacción local cuya emisión de partículas supere los niveles permitidos por la Unión Europea. Al menos, por el momento. Durante el pasado año atmosférico, que finalizó el pasado 31 de marzo, en el municipio hubo 41 días en los que se emitió un nivel de partículas PM10 mayor que el permitido por la ley, cuando el límite que marca Europa está en 30 días —cinco menos de lo que se consiente en un año natural—. Ello supuso la prorrogación, por parte de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía, de la medida 2 del Plan de Acción a Corto Plazo para la Mejora de la Calidad del Aire en Villanueva del Arzobispo
Pero no todas las conclusiones que se sacan de esta situación son negativas. En primer lugar, el alcalde, Gabriel Fajardo, tal y como hizo en su balance de la temporada invernal —la época en la que más se usan las calderas y, por tanto, en la que más datos negativos diarios de calidad del aire se registran—, recuerda que estas cifras se verán reducidas, casi con total seguridad, a final de año, cuando se resten del cómputo global los días que se han visto afectados por una intrusión de vientos saharianos. “Es posible incluso que, una vez eliminados de la lista esos días, ni siquiera hayamos superado el límite”, señala Fajardo. Cabe destacar, además, que en todo el mes de abril no hubo ni un solo día en el que la calidad del aire villanovense fuera mala, un hecho que viene a reforzar el argumento de las administraciones, que defienden que la principal causa de la contaminación en el municipio es el uso de las calefacciones domésticas en invierno. En cualquier caso, el alcalde no duda en señalar, por vez enésima, que la notable mejoría de los Índices de Calidad de Aire (ICA) en Villanueva del Arzobispo es el resultado del trabajo que están haciendo en los últimos meses las administraciones y del esfuerzo de la ciudadanía. “La mediciones están siendo buenas y la línea que llevamos es positiva, por lo que no queda otra que seguir así”, asegura.
A pesar de que en las dos primeras semanas de año tan sólo hubo un día en el que el nivel de emisión de PM10 se quedó por debajo de lo permitido por Bruselas —50 microgramos por metro cúbico—, la situación se estabilizó y enero concluyó con 19 resultados negativos. En febrero siguieron mejorando los datos y la cifra sólo se elevó hasta los 24 días. En marzo, el umbral sólo se cruzó una jornada que, precisamente, no contará en el cómputo de final de año porque se vio afectada por una intrusión sahariana. Esos 25 días supusieron un descenso del nivel de polución del 39,02% en un año. Por ello, desde el Ayuntamiento se confía en que la mejora de los datos continuará su progresión y no se considera descabellado decir que el municipio acabará 2020 con menos de 35 días con un ICA negativo, lo cual espantará cualquier amenaza de sanción.