“La Unión” logra salir del proceso concursal y encara su recuperación
La cooperativa supera el 65 por ciento de adhesiones
La Sociedad Cooperativa Unión de Úbeda, una de las más importantes de la provincia, se aproxima cada vez más a su ansiada recuperación económica tras la insolvencia padecida. La compañía, inmersa aún en un concurso de acreedores, desde el 29 de noviembre de 2016, llegó a acumular una deuda concursal de unos 48 millones de euros. Sin embargo, tras las medidas ejecutadas para reflotar su situación, “La Unión” recibirá, en próximas fechas, la aprobación de un convenio que derivará en su plan de viabilidad.
Para poder solventar los problemas de la sociedad era preciso reunir, antes del día 17 de este mes, un 65 por ciento de adhesiones de acreedores dispuestos a apoyar dicho plan. Anoche, incluso se superó esa cifra. La confianza de socios y entidades financieras ha llegado en tiempo y forma. El siguiente paso será recibir el auto judicial que dará por concluido el procedimiento concursal. A partir de ahí, la intervención externa sobre la cooperativa tocará a su fin y el consejo rector tomará otra vez las riendas de la empresa.
“Valoramos positivamente que la cooperativa no satisfaga su deuda penalizando la rentabilidad futura de su actividad de almazara sino capitalizando esa deuda. El modelo cooperativo se rige por un principio de libre adhesión y baja voluntaria, por el que la relación entre el socio y la entidad se basa en criterios de pertenencia y no de propiedad”, explica Rafael Peralta, representante de Mercantilea Soluciones, la entidad que se ha hecho cargo de la administración concursal de “La Unión”.
Según Peralta, cualquier carga en la rentabilidad futura de la cooperativa, como fruto del compromiso de pago de deuda a los acreedores, supondría una barrera importante a la entrada de nuevos productores. Los socios y acreedores han apostado por una entidad saneada y sin cargas para el futuro. El administrador concursal destaca el trabajo realizado, en el proceso, por el equipo técnico, Rafael Ortiz, Manuel Jesús Ruiz y el personal de la cooperativa.
La administración concursal de la Cooperativa Unión de Úbeda defiende que el “éxito” de la sociedad se ha de basar en “la búsqueda de la excelencia”. Para ello es necesario llegar a volúmenes de molturación similares a los que se tenía con anterioridad a la declaración del concurso.
“El potencial de esta cooperativa está en torno a los sesenta millones de kilogramos de aceituna por campaña y para ello es clave que se traslade confianza a los productores. El pago a los acreedores concursales con dinero procedente de campañas futuras conllevaría un efecto letal a esa confianza del productor oleícola, lo que llevaría a la baja masiva de socios y la no entrada de nuevos socios”, apunta Rafael Peralta, quien agrega: “La excesiva atomización del sector de producción de aceite de oliva en la provincia de Jaén supone una importante vulnerabilidad a su excelencia. La tendencia para los próximos años consiste en la agrupación tanto en la fase de comercialización en estructuras de segundo grado, como en la fase de producción a través de fusiones de cooperativas. El que Unión de Úbeda no penalice las campañas futuras con el pago a los acreedores concursales permitirá estar en primera línea en las negociaciones de fusión con otras almazaras, lo que a la postre encamina hacia los parámetros de excelencia deseados”.
convenio. Un elevado porcentaje de los acreedores apoyan la opción del convenio que se basa en una quita del 30 por ciento y una espera de 10 años, efectuándose el pago del 70 por ciento del crédito de la siguiente forma: un 5 por ciento a los dos meses de la firmeza del auto, un 2,20 a los nueve meses, un 2,20 al año y así, sucesivamente de forma anual, hasta 2028.
SATISFACCIÓN. El presidente de la cooperativa, Salvador Ráez, muestra su entusiasmo por el nuevo rumbo que empieza a tomar “La Unión”. Con más de 2.500 socios en su haber, la sociedad ubetense necesita apoyo y esfuerzo para recuperar la viabilidad y rentabilidad de antaño. Así, ya se plantean proyectos de futuro para que la situación sea próspera. “El consejo rector asumió una situación heredada de deuda, pero le hemos dado una segunda oportunidad a la cooperativa y queremos trabajar de forma totalmente inmaculada. Tenemos ilusión de que aumenten los socios y esperamos que los productores lleven su producto”, señala.