La devoción y la alegría de un lugar milenario, la Charilla

Las celebraciones de la aldea de Alcalá la Real culminan con la procesión de la patrona, la Virgen del Rosario

06 oct 2024 / 09:52 H.
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Sin exagerar Charilla es una aldea milenaria, pues su nombre se conoce, como mínimo, desde la época andalusí. De hecho, su ubicación estratégica es propia de un asentamiento ibérico. La pedanía alcalaína tiene el orgullo que ser el lugar donde se localizó un valioso tesoro de época hispanoárabe.

Aunque ha perdido población durante décadas, todavía hay gente que quiere garantizar su futuro, como muestra la actual tendencia a ganar vecinos. El momento señalado es las fiestas patronales en honor de la Virgen del Rosario. Charilleros y visitantes conviven durante tres intensas jornadas. La edición de 2024 empezó el pasado viernes y terminó anoche después de sonar el último fandango. La organización corresponde a la asociación vecinal —presidida por Rosi López—, con apoyo del Ayuntamiento. Los hermanos son Guadalupe y Nerea Contreras y José Gallego. Además, de la mano del colectivo femenino Ciudad de Flora se colocaron vistosos mandalas hechos con ganchillo. Se vivieron momentos muy especiales durante la ofrenda floral, el pasacalles de gigantes y cabezudos y el pregón. Todos vecinos y visitantes esperaron al gran día donde destacaron la comida colectiva y la procesión, que salió después de la misa de las siete y media de la tarde. Al final del desfile se bailó el típico fandango de Charilla. Para cerrar las jornadas festivas nada mejor que un “desayuno a ciegas”, otro almuerzo y juegos variados. La música no faltó ninguna noche.

Para Guadalupe Contreras Álvarez: “Las fiestas se viven con mucho cariño, en unos días de convivencia. La gente de fuera que viene a disfrutarlas siempre repite”. Miguel Extremera López contó que ha sido hermano muchos años y que es una experiencia bonita, por los cabezudos, la procesión y la comida colectiva. Ana María Juárez Pelado narró sus pensamiento sobre las fiestas de esta manera: “ Soy de Andújar y llevo aquí dieciséis años. Pregoné las fiestas que son algo diferente y llama la atención lo bien que se organizan” y Ana María Jiménez Hidalgo: “Soy de Málaga y vine al azar para tener tranquilidad. Las fiestas se viven como en familia, pues en Charilla la gente es muy buena”. Por último, José Gallego Aranda explicó emocionado que este año es la segunda vez que participa como hermano mayor y que se trabaja mucho para que las fiestas sean posibles pero que compensa por los momentos vividos.



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