La Calderona recibe 2.700 visitas en su primer mes de apertura

La cisterna romana de La Calderona, en Porcuna, tan solo lleva abierta un mes y ya es una atracción turística de renombre en el municipio. Desde su inauguración el pasado 11 de julio, el monumento arqueológico ha recibido 2.700 visitas. Datada en el siglo I a.C., fue uno de los principales depósitos de almacenamiento de agua urbano de la ciudad de Obulco y se ha conservado hasta el presenta bajo casas de la actual Calle Padilla, donde se ha tenido que llevar a cabo un complejo proceso de restauración, consolidación y puesta en valor para su apertura. El alcalde de Porcuna, Miguel Moreno, ha valorado con Europa Press el interés despertado por este recuperado espacio, a pesar de que “no se ha hecho todavía una promoción fuerte porque no se daría respuesta adecuada a la demanda que existiría”.

En este sentido, Moreno subraya que quiere que todo aquel que visite Porcuna y La Calderona, “se lleve una buena impresión, que sea bien atendido y tenga una visita guiada, explicativa, amplia y en condiciones”. Al respecto, el alcalde ha señalado que hay intenciónd e ampliar la Oficina Municipal de Turismo con más recursos humanos y materiales, con el fin de dar respuesta a la demanda fuerte que se espera a partir de otoño. Será a partir de esta época cuando la Administración local potencie la promoción de este símbolo de la época romana. Actualmente, el monumento declarado Bien de Interés Cultural (BIC) se puede conocer llamando a esta oficina para reservar una visita con sus profesionales. “Si es en horario de atención al público, los van a atender sobre la marcha y, si no, va a quedar la llamada grabada y se le va a devolver para darle fechas y horas para atender su petición”, ha comentado Moreno.

Las visitas han estado a cargo del director del proyecto arqueológico de La Calderona y del director del Museo Arqueológico Municipal de Obvlco, Pablo Casado y Fernando Salas. Para su restauración y puesta en valor, se han destinado cerca de 1,7 millones de euros sufragados por el Gobierno central con cargo al 1,5% Cultural, el Ayuntamiento y la Diputación de Jaén. El Gobierno ha aportado el 70% del presupuesto total; mientras que el la Administración local ha asumido el 18% y la provincial, el 12%. En su vertiente arquitectónica, el proyecto ha estado dirigido por Pablo Millán y ha incluido cinco grandes actuaciones. Estas han sido la creación de un edificio con una rampa helicoidal para descender a la cota de la cisterna, así como la habilitación de una pasarela y puente para hacer posible la entrada al conjunto subterráneo hidráulico, aprovechando el túnel que durante la Guerra Civil española ejecutaron los zapadores del ejército para su uso como refugio antiaéreo.

Asimismo, se ha llevado a cabo la restauración y la puesta en valor de la propia cisterna y de los restos arqueológicos hallado en el entorno. El magnífico enclave da cuenta de la relevancia de la ciudad de Obulco, la antigua Ibolca y capital de los Túrdulo, que fue una de las grandes urbes de la Bética romana. Cabe destacar la monumentalidad constructiva a base de bloques y losas megalíticas de piedra autóctona y el estado intacto en que ha llegado a la actualidad, lo que la convierte en “uno de los mejores monumentos arqueológicos romanos conservados de Hispania y del Mediterráneo Occidental”, como aseguró Casado en la inauguración.