Jaén, a la cabeza de la Lista Roja del patrimonio andaluz

Si las paredes hablaran, no siempre dirían cosas agradables. Las que quedan en pie de las 26 construcciones de Jaén que se hallan en la Lista Roja del Patrimonio, desde luego que no. La jiennense es la provincia andaluza que tiene el dudoso honor de ser la que cuenta con más bienes en dicha relación, una iniciativa de la Asociación Hispania Nostra que nació en noviembre de 2007 con el objetivo de dar a conocer y proteger joyas del patrimonio cultural y natural español que se encuentran en abandono y en peligro de desaparición. De estas cerca de 30 edificaciones, 19 están protegidas por ley, 12 son de titularidad privada y 10 de titularidad pública. Hay una cuya pertenencia se reparte entre lo público y lo privado y, por último, tres de las que no se conoce quién es su propietario.

Cabe destacar que existen 5 bienes jiennenses que dejaron de estar en riesgo y pasaron a la llamada Lista Verde gracias a iniciativas, bien públicas, bien privadas, de mantenimiento o rehabilitación. Son el Puente Mocho, que data de los siglos I y II y se halla entre Beas de Segura y Chiclana de Segura; la Iglesia Parroquial de San Lorenzo, de entre los siglos XVI y XVIII, en Úbeda; la Ermita Madre de Dios del Campo, de entre los siglos XV y XVIII, en Úbeda; el oratorio rupestre de Valdecanales, de los siglos VI y VII, en Rus, y la Iglesia de Santo Domingo, del siglo XVI, en La Iruela. Una construcción, la Cárcel Modelo del Partido Judicial de Úbeda, está en la Lista Negra, en la que se hallan las edificaciones ya irrecuperables. El motivo, que en octubre de 2014 fue derrumbada prácticamente en su totalidad para construir edificios. Precisamente Úbeda es, con 3 construcciones, la ciudad jiennense que más aparece en la Lista Roja, junto a la capital. Les siguen Torredonjimeno y La Iruela, con dos, a saber, la Torre Benzalá y el Molino del Cubo, y el Puente y el Torreón de Nubla, respectivamente.

El Castillo de Giribaile, en Vilches, es el bien del patrimonio jiennense que más tiempo lleva en riesgo de desaparición. Entró en la Lista Roja el 21 de noviembre de 2007 y, desde entonces, no ha salido de la misma. Se trata de una fortaleza de titularidad privada que data del siglo IX y que se halla protegida por la Declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949 y la Ley 16/1985 sobre el Patrimonio Histórico Español. El castillo fue construido por los musulmanes sobre un recinto ibero-romano. En 1170 lo controlaban los almohades, en 1227 pasó a manos de Fernando III el Santo, luego lo ocupó la Orden de Calatrava, en 1274 Alfonso X lo cedió a Baeza y en 1292 Sancho IV lo entregó al juez de Baeza, Gil Bayle de Cabrera, del que tomó el nombre. En pie quedan dos torreones rectangulares, lienzos de muralla y un aljibe con bóveda de cañón. Hay restos de una necrópolis árabe a las faldas del castillo.

En el otro extremo de la lista está el Convento de San Francisco de Asís, en Úbeda, que fue incluido en la misma el pasado 30 de octubre. Se fundó tras la conquista de la ciudad por parte de Fernando III en 1233, y en los siglos XV y XVI sufrió varias remodelaciones. Se usó como centro de estudio de filosofía y también albergó el archivo ubetense hasta 1808. En la Guerra de la Independencia fue saqueado por las tropas francesas. Quedó en ruinas hasta 1815, cuando su iglesia se reconstruyó en estilo neoclásico. En la desamortización eclesiástica de 1836 se subastó y, desde entonces, su deterioro ha sido progresivo. En 2005 el Ayuntamiento de Úbeda impidió la demolición de los restos de su iglesia, muros y portadas y restauró su entrada principal.