Embarque de las reses en Arroyo

Las tradicionales fiestas del toro ensogado arrojan un balance positivo este año

27 abr 2018 / 09:08 H.

Arroyo del Ojanco cierra el periplo de sus fiestas del toro ensogado con ausencia de incidentes destacables y con la presencia de vecinos y visitantes, en un gran número. Ayer, desde la Hermandad de San Marcos de Arroyo del Ojanco, que preside Ramón Ojeda García, se afanaban en las tareas de embarque de reses para proceder a su traslado al matadero. Allí se realizará su correspondiente sacrificio, tal y como dicta el reglamento autonómico de espectáculos taurinos de la Junta de Andalucía.

Es, por tanto, momento para el balance, que se traduce en positivo según la alcaldesa de Arroyo, Marisa Gómez: “Satisfechos en el municipio sobre las fiestas de San Marcos, sobre todo por la falta de cogidas graves e incidentes a destacar. Este año, a pesar del calendario de celebración entre semana, se registró mucho público, venido desde fuera, de municipios cercanos y del resto de España, sobre todo, aficionados taurinos”.

También destacó la presencia de numerosos recortadores, llegados desde Madrid y otros puntos de la geografía española, además de aficionados de los municipios que componen la Federación Española del Toro de Cuerda, entre ellos, Benavente, Yuncos, Grazalema y Lodosa. Ayer, Diario JAÉN, en su compromiso con la difusión de las fiestas taurinas en el municipio arroyense, regaló con el ejemplar de su edición impresa una medalla del Evangelista San Marcos.

Este año, durante el transcurso de las fiestas del toro ensogado en honor de San Marcos, se desencajonaron 32 toros, dos novillos y 27 vacas. En el primer desencajonamiento, la suelta de reses estuvo marcada en las calles del recinto, así como en la explanada de San Marcos, por dos toros, dos novillos y hasta veinticinco vacas.

Arroyo del Ojanco despidió sus fiestas, un año más, con un tradicional pasacalles amenizado por la charanga El Bombazo. Este acto se celebró con las primeras luces de la noche y estuvo precedido por el chupinazo lanzado desde los propios toriles de la Hermandad de San Marcos, situados junto a la sede del colectivo, en las cercanías de la explanada de San Marcos.