Dos “capitales” nacionales en niveles de contaminación

El aire de Villanueva y Bailén está de nuevo en el punto de mira

01 mar 2019 / 16:34 H.

Sus nombres aparecen entre los de ciudades como Barcelona, Bilbao, Madrid, Sevilla, Valencia, Zaragoza o Córdoba en las listas de poblaciones con el aire más contaminado. Villanueva del Arzobispo y Bailén son “capitales” nacionales en este indeseado ranking y vuelven a estar en el punto de mira. Así lo advertía Ecologistas en Acción en estos últimos días. Con un anticiclón instalado sobre la Península Ibérica, se han disparado los niveles de partículas en el aire urbano, agravado además por la llegada de polvo africano. En más de una treintena de ciudades de todo el país, se ha superado en las últimas semanas el valor límite diario de partículas PM10, establecido por la normativa en 50 microgramos por metro cúbico.

Estas PM10, como las define el Ministerio para la Transición Ecológica, son partículas sólidas o líquidas de polvo, cenizas, hollín, partículas metálicas, cemento o polen, dispersas en la atmósfera (de entre dos y diez milésimas partes de 1 milímetro). Entre las fuentes de emisión, destaca que un 77,9% de la cantidad total emitida procede del polvo resuspendido existente en la atmósfera. La industria, la construcción y el comercio con un 7,6% y el transporte rodado, con un 6,5%, representan otros focos de contaminación. Como fuentes minoritarias, el 3,7% procede de quemas agrícola y un 3,3% es de origen doméstico.

Sin haber vuelto a ver la lluvia desde que “Helena” trajo unos 30 litros de media los primeros días de febrero, los niveles están disparados. Y así lo mide la red de vigilancia y control de la calidad del aire de Andalucía, de la Consejería de Medio Ambiente. En los informes diarios, además de cantidades exactas, se categorizan los datos recogidos desde “Buena” a “Muy Mala”, además de “Admisible”, “Regular” y “Mala”. Y en los dos últimos meses, se acumulan los alarmantes rojos en la medición de partículas. Por ejemplo, el pasado domingo, la situación en Villanueva era “muy mala” y en Bailén, “mala”. Se recogieron 164 microgramos por metro cúbico en el primer caso y 135, en el segundo. Un día después, mala en ambas y el martes y el miércoles, “admisible”.

Un planteamiento común que se hacen los responsables municipales tanto de Bailén como de Villanueva del Arzobispo es que se debe ahondar más en el estudio del origen de estos altos niveles para implantar nuevas medidas. Las industrias de uno y otro municipio, la cerámica y la orujera, hicieron ya los deberes, con inversiones para evitar las emisiones de partículas y, ante las subidas de los niveles, pasan controles exhaustivos. Desvinculado el problema de este origen, se pone el foco en las emisiones de las chimeneas y calderas, además de las quemas agrícolas. En este sentido, ponen en duda que estos municipios superen en número y volumen a otros, incluso, con más población. Lo que sí los diferencia es, como apuntan, que en ambos están situadas las únicas estaciones de medición de la calidad del aire en la provincia, junto con dos en la capital, que también arrojan mediciones preocupantes.

El problema de Villanueva viene de lejos, como reconoce su alcaldesa, Isabel Nogueras. De hecho, ha llegado hasta la Unión Europea y hace unos meses se hablaba de un “ultimátum” a España para controlar este problema. Nogueras apunta que, entre las últimas medidas adoptadas, está la prohibición de la Junta de la quema de restos de poda del olivar dentro del municipio. Pero estas, dice, son prácticamente inexistentes. Por las emisiones de calefacciones individuales y las chimeneas, asegura que se están realizando bastantes cambios de calderas y, con la llegada del gas natural, muchos usuarios han cambiado de fuente energética. “Entendemos que deben ir bajando”, apunta. “Pero lo que se ha hecho hasta ahora no ha funcionado”, reconoce. Es necesario, a su juicio, un estudio más detenido de por qué se concentran allí las partículas. Ya ha contactado con la nueva delegada del área, Soledad Aranda, con la que tendrá una reunión la próxima semana para tratar este asunto, entre otros.

Para Bailén es un “sambenito” volver a estar entre las ciudades más contaminadas de España. Su alcalde, Luis Mariano Camacho, defiende que no hay motivación que diferencie este municipio de otros con características similares en la provincia, por lo que se hace necesario un estudio más pormenorizado del origen para buscar las soluciones más convenientes.