Como en Fuenteovejuna para que el río Zumeta “resucite”

La marcha “Zumeta Vivo” sale a las once de esta mañana desde el paraje de Las Juntas —en la confluencia entre el río que da nombre a la movilización y el Segura—. Desde allí la comitiva asciende hasta la central de Miller, situada a unos seiscientos metros de distancia. La movilización fue lanzada, hace unas semanas, por la Asociación para la Conservación Piscícola de los Ecosistemas Acuáticos del Sur (Acpes). La protesta cuenta con el apoyo de vecinos de la comarca segureña y áreas aledañas, así como de colectivos entre los que se encuentra Ecologistas en Acción y la Unión de Ciudadanos Independientes (UCIN) de Santiago-Pontones. Desde Acpes se pretende que, como en Fuenteovejuna, haya una unión que acelere la solución la desecación del cauce del Zumeta.

¿Cuál es el trasfondo? Con independencia de la pluviometría, más escasa de la media, que caracteriza al presente año, el curso fluvial lleva un flujo que permite una elevada biodiversidad. Esto es así hasta la presa de la Vieja. Desde allí, Iberdrola bombea agua hasta la central de Miller. La consecuencia es que se acaba con el denominado caudal ecológico. En otras palabras, que curso abajo del pequeño embalse, el Zumeta baja, literalmente, seco.

En su convocatoria de la marcha de hoy, Acpes asegura: “Ante la tardanza del inicio de las obras proyectadas por Iberdrola y aprobadas por la CHS [Confederación Hidrográfica del Segura] en la presa de La Vieja ; ante la pasividad de las Administraciones competentes y con el fin de poder restablecer el ‘caudal ecológico’ al cauce seco del río Zumeta, exigimos a Iberdrola que no desvíe agua alguna hacia el salto de Miller, desde la Presa de La Vieja, y la deje correr libremente por el cauce seco del ‘río’ Zumeta, hasta la finalización de las obras de instalación y acondicionamiento de un desagüe que asegure dotar al río del caudal ecológico que la ley impone.”

Desde diciembre de 2018, la organización clama contra la desecación, una situación en la que también influye que se trata de un curso fronterizo con Castilla-La Mancha. Tanto la Junta de Andalucía, que tiene que dar el visto bueno a las obras necesarias, como el Ayuntamiento de Santiago-Pontones, del que depende la concesión de la licencia consideran que han intervenido con rapidez y diligencia. Por lo que respecta a Iberdrola, estima que la solución está ya cerca —a falta de los últimos permisos— y resalta que hace tiempo que solicitó autorización para los trabajos necesarios.

La protesta de hoy pretende servir de acicate para acortar plazos y que se tomen medidas cuanto antes. El pasado día 10 el Ayuntamiento concedió la licencia de obra a Iberdrola tras recibir de la Junta el último informe imprescindible.