Avanza la investigación del incendio de Navas de San Juan

Los testigos no sitúan en el lugar de los hechos a tres de los presuntos implicados

20 ene 2022 / 16:53 H.
Ver comentarios

Ni tres de sus amigos ni el vecino que ayudó a sofocar el fuego con su remolque situaron ayer en el lugar de los hechos a ninguno de los cinco jóvenes investigados por el caso del incendio de un contenedor ante la casa del alcalde de Navas de San Juan, Joaquín Requena, cuando él dormía en la vivienda. Tampoco otro vecino que descubrió el contenedor ante la casa, antes de que ardiera, ni una mujer que dijo haber visto otro contenedor en llamas esa misma madrugada, la del pasado 14 de noviembre, en una zona distinta del pueblo. Todos ellos declararon como testigos en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de La Carolina en el marco de la investigación del mediático suceso. También compareció ante el juez el alcalde navero.

Los cinco jóvenes supuestamente implicados en el caso están investigados por un presunto delito de incendio y otro de atentado en grado de tentativa, y sobre dos de ellos, C. L. C. y L. M. M. L., pesan sendas órdenes de alejamiento hacia Requena. Estos dos sí que confesaron ante el juez, tres días después de los hechos, haber colocado el contenedor ante la puerta del domicilio del alcalde, haber metido dentro cartones y haberlos quemado, aunque “por hacer la gracia” y sin intención de provocar los daños causados: dos fachadas afectadas por las llamas y un coche, estacionado en la calle, completamente calcinado.

Según fuentes cercanas a la investigación, los amigos de los jóvenes presuntamente implicados, que fueron citados por el Juzgado, explicaron que los tres sobre los que no pesa la orden de alejamiento no estaban en la zona cuando se produjo el incendio. Aún se está a la espera de contar con las pruebas derivadas del volcado y la triangulación de la señal de los teléfonos móviles de los investigados para radiografiar sus pasos durante la noche de marras.

Por su parte, Requena, que, según las mismas fuentes, se mostró nervioso y titubeante ente el juez, detalló que fueron las llamadas telefónicas y los vecinos quienes lo despertaron y alertaron del fuego y que, tras retirar cortinas y muebles, marcó el 112 para solicitar ayuda.

La Guardia Civil arrestó a dos jóvenes, de 19 y 21 años, horas después del incendio, por su posible implicación en los hechos, y un día más tarde se detuvo a otros tres vecinos del municipio. Tras prestar declaración el 17 de noviembre en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de La Carolina, que, posteriormente, se inhibió a favor del número 1, que era el que estaba de guardia cuando ocurrió el incidente, el juez ordenó que los cinco detenidos quedaran en libertad provisional como investigados por un presunto delito de incendio y otro de atentado en grado de tentativa.

Provincia