“Ya venimos de casta. Jugamos desde pequeños, desde antes de echar los dientes ya estábamos con la bola en la mano”

PREMIO “DEPORTE SINGULAr”

26 jul 2019 / 12:01 H.

Los bolos serranos o bolo andaluz es una modalidad de juego de este deporte desconocida para muchos, y que ya cosecha el éxito de muchos de sus practicantes. “Los bolos serranos son un deporte autóctono de la zona, que consiste básicamente en tirar con una bola gorda, la “alambradura”, a un “mingo”, una bola más pequeña”, explica Iván Martínez, uno de los practicantes de esta modalidad deportiva. “Cuanto más fuerte y derecho le des, más puntuación obtienes, y el que más puntos obtenga es finalmente el que gana”, añade. Iván y Jaime son dos hermanos de Chilluévar que conocen el mundo de los bolos desde pequeños, cuando su abuelo inaugurara la bolera del pueblo. “Ya venimos de casta. Jugamos desde pequeños, desde antes de echar los dientes ya estábamos con la bola en la mano”. Iván señala cómo a través de la tradición familiar, tanto su padre como él y su hermano han adquirido una especial afición por este deporte, llegando a competir en torneos nacionales. Los jóvenes aficionados de Chilluévar, conocidos como “los Caracoles”, en honor al apodo familiar, participan en diversos campeonatos a través de diferentes modalidades: la práctica individual, en parejas, o incluso en equipos de cuatro personas.

“Ahora llevamos un año que no nos dedicamos tanto a ello por tema de trabajo, solo cuando tenemos tiempo libre”, señala Iván. Sin embargo, los Martínez saben lo que es alzarse con la victoria en algunos de estos campeonatos. Iván, con 18 años, ya se hizo con el primer premio en el torneo nacional: “Soy el muchacho más joven en ganar en España el campeonato de primera división. También fui subcampeón con 16 años”. Por otra parte su hermano, Jaime, ha participado ya en numerosas competiciones a nivel provincial y andaluz, en las que se ha alzado con la victoria en más de una ocasión. Este equipo de chilluevenses cuentan con una larga lista de galardones y reconocimientos a su trayectoria dentro de la Federación Andaluza de Bolos, a la que ahora se suma este Premio Reino de Jaén, con el que se encuentran muy emocionados. “No me lo esperaba la verdad. Cuando me llamaron para comunicármelo me quedé bastante sorprendido”, comenta Iván. Aunque se trata de una modalidad de juego totalmente desconocida en el panorama deportivo, “los Caracoles” no han dejado de lado sus raíces para seguir llevando el nombre de su abuelo en cada competición en la que se inscriben. “Llevamos un año un poco malo en ese sentido, porque no podemos jugar todo lo que quisiéramos”. Este mismo sábado precisamente ambos se preparan para competir en el torneo de bolos serranos que ha organizado el Ayuntamiento de Chilluévar.