“Este reconocimiento es tanto para las socias actuales como las que pasaron por ‘Dama’ y dejaron parte de su personalidad”
PREMIO colectivo implicado
Más de un centenar de mujeres urde cada día, con mimo y dedicación, la presencia activa de una asociación que celebró el pasado mayo su veinticinco aniversario. Cazorla tiene el privilegio de contar con un nutrido grupo de mujeres digno de merecer el premio Reino de Jaén Alto Guadalquivir. Su andadura, emprendida en 1994, es ejemplo de crecimiento exponencial a medida que sucedía su primer cuarto de siglo, y que con orgullo abandera. Ante una coyuntura en la que predominaban los prejuicios en torno a la mujer, la asociación de mujeres Dama no dudó en hacerse con una sede que fuera el germen del recorrido tendido desde sus cimientos. Por él, el colectivo ha transitado buen número de cazorleñas, que dejaron su huella. Indudablemente, todas y cada una de estas habrán servido para retroalimentar a nuevas generaciones ávidas de aportar inquietudes y novedosas maneras de comprender el mundo. Otras mujeres, seguirán dando lo mejor de sí mismas, por muchos años que pasen, y tomarán como fuente de enriquecimiento el aire fresco que emana de las incorporaciones.
La presidenta de la asociación de mujeres Dama María José Juárez, se muestra complacida por el galardón que le es otorgado al colectivo que encabeza. “Este reconocimiento es tanto para las socias actuales como las que pasaron por ‘Dama’ y dejaron parte de su personalidad”. Son varios los principios que conforman la esencia de esta asociación. Principalmente, la reivindicación y defensa de la igualdad se erige como su eje vertebrador, y del que parten principios tales como la promoción de la participación y presencia de la mujer en la vida política, económica, social y cultural. Asimismo, la conciliaciación entre vida familiar y laboral forma parte del “catecismo” por el que el colectivo Dama se rige y emprende las tantas actividades y talleres que ofrece. “Generalmente, los talleres los organizamos en función de las necesidades. Son muy variados, tenemos icluso de bailes y artesanías tradicionales”, afirma Juárez.
La participación y la puesta en valor del papel de la mujer en todos los órdenes de la vida,implica el motor de una lucha por el reconocimiento de derechos y oportunidades que es intrínseca de tiempos teñidos de violeta. La asociación de mujeres Dama es claro ejemplo de una labor integradora y destinada a la proyección de las mujeres en la ciudadanía. “Pienso que nos han concedido este premio por la participación activa que llevamos a cabo, además de por las campañas de sensibilización que realizamos”, admite, con modestia, Juárez, quien habla en nombre de sus compañeras que portan el buen hacer por visibilizar el papel de las mujeres.