Voluntarios para salvar vidas
Quienes acuden al centro se encargan del cuidado diario de casi ochenta canes desinteresadamente


La protectora de animales de Andújar Mi fiel Amigo se hace cargo, actualmente, de alrededor de ochenta perros. El trabajo diario de los voluntarios consiste en visitar, una vez al día, sobre tres horas y media, el lugar donde tienen a los animales y encargarse de la limpieza y de darles de comer. También curan a los que están heridos y les dan medicamentos a los que lo necesitan. Pero, además de este refugio, su presidente, Rafael Sánchez, señaló que poseen una antigua residencia canina, donde tienen una treintena de perros más a los que cuidar. Esta protectora comenzó hace once años y actualmente cuenta con cerca de veintiséis voluntarios. Trabajan en la protectora por la tarde, y en el día a día, trabajan siempre cuatro; la vicepresidenta, Alicia Torres, explicó que se dividen las tareas: “Dos personas que están limpiando, y dos que vigilan”. El presidente de esta protectora señaló que poseen “perros abandonados en su mayoría, algunos cedidos. Pero son perros que no quiere la gente. Algunos nos los echan por encima de la valla, otros nos lo encontramos atados. Otros nos llaman porque se los han encontrado por la carretera”. Recalcó que aunque a ellos les llegan animales continuamente, y no existe una época destacable en la que tengan una mayor afluencia, sí señaló: “Algunas veces coincide el final de la época de la caza. Más podencos, más galgos abandonados. Pero yo no noto mucha diferencia de unos meses a otros”.
Esta protectora municipal tiene un convenio con otra que se encuentra en Alemania que se llama “Sos Dog”, a la que mandan sus perros. Llevan a cabo el mismo proceso con todos los perros que le llegan: “Le hacemos una ficha, una fotografía, contamos su historia, hacemos sus vídeos”. Luego esta información se la mandan a la protectora alemana, y esta a su vez la cuelga en su página. Y desde esta protectora alemana “se encargan de hacer su visita control, de hablar con la familia, de firmar un contrato. Son los que comunican, cuando ya hay una adopción que se ha hecho”. El presidente de la protectora andujareña explicó que no suelen poner chips a aquellos perros que no tienen cuando les llegan, porque puede tardar dos o tres años en salir de la protectora: “Y por ello ponemos el chips un mes antes de que se vaya el perro con la familia”.
Esta protectora tiene una página en facebook que llevan voluntarios desde la que se ven los perros que cuidan. Alicia Torres recalcó que es un arma de doble filo: “Puede ser contraproducente. Sirve para que la gente abandone más y sepa donde tener que echarlos”. Sin embargo, destacó la importancia de las casas de acogida para ellos: “Es la mayor ayuda que ahora mismo nos pueden brindar”. Explicó que les faltan sitio, y que la colaboración de las casas de acogidas “son fundamentales” para paliar esto.